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Vecinos y turistas, en una terraza de los Jardines de Pereda el pasado jueves. Por la mañana hizo sol y por la tarde llovió. Javier Cotera
La Aemet defiende que las previsiones se cumplieron «en un grado bastante alto»

La Aemet defiende que las previsiones se cumplieron «en un grado bastante alto»

Cantabria ·

El consejero de Turismo insiste en que no ha sido una mala Semana Santa pese a que los meteorólogos «nos han crujido con el pronóstico y luego no hizo tan malo»

Daniel Martínez

Santander

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Martes, 3 de abril 2018, 07:09

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El jueves, desde lo alto de Peña Cabarga y durante una conexión en directo con un canal de televisión de ámbito nacional, el presidente de Cantabria, MIguel Ángel Revilla, fue el primero en señalar a los meteorólogos como culpables, por lo menos en parte, de que muchos turistas que pensaban venir a la región cambiaran de opinión al ver la previsión del tiempo. «A ver si se enteran, aquí con sur no llueve», afirmaba Revilla, «harto» de repetir el mismo discurso durante años. A sus espaldas se veía un paisaje de la bahía de Santander y el cielo casi limpio de nubes, es cierto, pero también lo es que a última hora de la tarde comenzó a llover en prácticamente toda la región, que el viernes por la noche hubo restricciones en la A-67 por nieve o que en algunos puntos como Soba se acumularon entre el jueves y el domingo hasta 29,2 litros por metro cuadrado.

Este lunes, el consejero de Turismo, Francisco Martín, insistía en la tesis de su jefe para justificar que la ocupación hotelera durante los últimos días festivos se quedara en el 80%, muy por debajo de lo que esperaba el sector. En su opinión, la previsión meteorológica «no fue la adecuada» y «los meteorólogos nos han crujido y luego no ha hecho tan malo» como anunció la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet).

Desde este organismo tienen una visión muy distinta y defienden que las previsiones, especialmente en lo relativo a la lluvia, se han cumplido «en un grado bastante alto». Dijeron que habría inestabilidad -una mezcla de sol, lluvias y viento- y consideran que así ha ocurrido. «Se hizo con rigor. La prueba es que todos los observatorios de Cantabria han registrado precipitaciones estos días. Dijimos que iba a llover, no que fuera a llover mucho», recuerda el delegado de la Aemet en Cantabria, José Luis Arteche. En los cuatro días centrales de la Semana Santa, en la mayoría de localidades de la región se acumularon más de diez litros de agua por metro cuadrado. Unos registros no especialmente elevados, pero repartidos entre jueves, viernes y sábado. En Santander, Torrelavega y Castro Urdiales, por ejemplo, tan solo el domingo no cayó ni una gota. Por otra parte, las temperaturas mínimas estuvieron de forma generalizada por debajo de los 8º.

«Sabíamos que la Semana Santa tan pronto iba a ir peor, pero la predicción no fue la adecuada»

Francisco Martín | Consejero de Industria y Turismo

A tenor de los datos que han recogido durante la última semana, la única jornada en la que hubo cierta discordancia entre la previsión y la realidad fue la del sábado. «Los que miraron nuestra información el miércoles verían que se esperaba un tiempo lluvioso hasta la noche y finalmente la mejoría llegó antes, al mediodía. Pero es que el jueves ya cambiamos esa previsión y la concretamos mucho más», apunta Arteche.

«En todas las localidades ha habido precipitaciones. Dijimos que iba a llover, no que fuera a llover mucho»

José Luis Arteche | Delegado de la Aemet

Además, recuerda que la inestabilidad meteorológica es la principal característica del tiempo borrascoso, sobre todo en el Cantábrico, donde se pueden dar dos tiempos muy distintos en un mismo día. «Lo que no se puede es pedir con 15 días de antelación una predicción exacta. Nosotros somos gente de ciencia. Trabajamos con criterios científicos y hacemos las previsiones no sólo pensando en el turismo, sino en todo el mundo», concluye.

Santander, «motor turístico»

También hizo este lunes balance de la Semana Santa la capital. Según los datos municipales, la ocupación media en los hoteles de Santander de 3 a 5 estrellas superó el 94%. Destacó la noche de Viernes Santo con «muchos establecimientos llenos». En opinión de la concejala del área, Miriam Díaz, estos datos confirman a la capital cántabra como «motor turístico de la región». Las oficinas de turismo de los Jardines de Pereda y El Sardinero atendieron a 2.141 personas, con una media diaria de 535.

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