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María Gil
La epidemia de gripe empieza a remitir y ya suma seis fallecidos

La epidemia de gripe empieza a remitir, pero ya suma seis fallecidos en Cantabria

Todas las víctimas eran mayores de 65 años y con patologías previas, aunque sólo dos de ellos se habían vacunado

Ana Rosa García

Santander

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Jueves, 18 de enero 2018

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La gripe empieza a remitir, aunque en la última semana ha sumado otros dos nombres a la lista de fallecidos. Con ellos, ya son seis las personas que no han logrado superar las complicaciones desencadenadas por el virus. «Todas las víctimas eran mayores de 65 años y presentaban pluripatología importante. Cuatro de ellos no estaban vacunados», según la información facilitada a este periódico desde la Consejería de Sanidad.

El último informe de situación confirma que se ha iniciado el descenso de la onda epidémica estacional, aunque si bien la propagación siempre es acelerada, el virus irá desapareciendo de forma lenta. Es por eso que la gripe aún seguirá siendo uno de los diagnósticos más repetidos al menos hasta mediados de febrero.

Desde el inicio de la temporada de control (octubre), el sistema de Enfermedades de Declaración Obligatoria (EDO) señala una cifra de 8.642 contagios en Cantabria, acumulados en su mayor parte durante las tres últimas semanas. El incremento de casos se produjo de forma más destacada a partir de la última semana de 2017. Concretamente, el cambio de tendencia ascendente se percibió a partir del 26 de diciembre, alcanzando los máximos diarios, con más de 500 casos al día, el 2 y el 8 de enero. A partir del día 10 se detectó un nuevo cambio de tendencia descendente que ha situado la media diaria entre los 300-400 casos. La tasa de incidencia actual ha descendido a 340 contagios por cada 100.000 habitantes.

En toda España, la gripe ha provocado más de 1.500 hospitalizaciones graves y 157 muertes

Desde la Dirección General de Salud Pública se apunta que «de los datos que se manejan se detecta que la onda epidémica se está comportando dentro de lo esperable, tanto clínica como epidemiológicamente, por lo que se supone que a partir de este momento se mantenga el descenso de incidencia ya iniciado».

Mientras en Cantabria se frena la expansión del virus, al igual que en Asturias, que hasta ahora había sido la comunidad más castigada por la gripe –y la primera en entrar en epidemia por tercer año consecutivo–, a nivel nacional retoma su fase de ascenso. El estudio de vigilancia epidemiológica del Instituto de Salud Carlos III, difundido ayer, constata una mayor presencia de la gripe A (28%) en esta fase de la epidemia, mientras que al comienzo circulaba casi en exclusiva el virus B. En toda España, la gripe ha provocado más de 1.500 hospitalizaciones graves y ha dejado hasta el momento un balance de 157 defunciones. Ambas cifras prácticamente se han duplicado en la última semana, coincidiendo con la fase de ascenso de la epidemia y con la ola de frío.

El mapa de situación indica que la difusión de la enfermedad es epidémica en todas las regiones salvo Canarias; la intensidad es muy alta en La Rioja y Ceuta, alta en Navarra y Baleares y media en el resto del territorio vigilado, excepto en Asturias, Aragón, Canarias, Castilla-La Mancha, Extremadura y Melilla, donde el nivel de intensidad es bajo.

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