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Adela Sanz
Martes, 7 de febrero 2017, 07:33
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El cuerpo técnico de la Gimnástica afronta una semana atípica por dos motivos. El primero, porque juega el viernes y sólo dispone de tres días de entrenamientos por delante; y el segundo, porque por primera vez desde hace bastante tiempo puede contar con todos los futbolistas de la plantilla para preparar el partido, con la excepción de Zalo, que está finalizando su proceso de recuperación, pero todavía no ha comenzado a ejercitarse. Se espera que lo haga a lo largo de las próximas semanas.
Jornada tras jornada, todas las semanas son muy similares para los equipos de Tercera. Se entrena de lunes a viernes y se juega el sábado o el domingo. Raro es que se salgan de ese plan, y sólo cuando hay alguna fiesta o un puente. Disputar los partidos el viernes cuando el resto de los encuentros se juegan los dos días siguientes es algo que se sale de lo corriente y que, de vez en cuando, suele hacer el Bezana cuando actúa de local. Y como esta jornada la Gimnástica visita el Municipal de Santa Cruz, le ha tocado adaptar su programa de entrenamientos a esta circunstancia.
Sin sancionados
Esta semana la plantilla tiene previstos tres días de trabajo: se ejercitó ayer lunes y volverá a hacerlo hoy y el jueves, dejando la jornada de descanso para mañana. Sin lesionados ni sancionados, al menos de momento, si todo transcurre con normalidad, Chiri podrá contar con el grupo de jugadores casi al completo por primera vez después de muchas semanas. Por uno u otro motivo, y a veces por ambos a la vez, se ha visto obligado a preparar el siguiente duelo sin todas sus piezas.
Esta semana no hay sanciones, puesto que ningún futbolista fue amonestado frente al Revilla. Los centrales Mario y Nacho, que fueron titulares, acumulan cada uno cuatro tarjetas amarillas y se hallan a sólo una de cumplir ciclo, pero tuvieron una tarde tranquila y no asumieron más riesgos de los necesarios. Y Borja Camus, que se perdió el partido porque estaba suspendido, volverá a estar disponible para su entrenador.
En cuanto a los lesionados, la enfermería blanquiazul se encuentra casi vacía. A la espera de que Zalo la abandone definitivamente y no tardará mucho. El lateral, que no ha entrenado esta temporada con el equipo ni siquiera llegó a iniciar la pretemporada con el resto de sus compañeros, ya está con un protocolo de ejercicios para fortalecer el pubis que termina la próxima semana. Entre el resto de sus compañeros, nadie ha salido tocado esta jornada y los problemas físicos parece que dejan tranquilos a los gimnásticos, al menos de momento.
Atrás quedan los días en que el entrenador tenía que recurrir a la polivalencia de sus futbolistas para completar la alineación, ajustando los engranajes del once. Esta semana todos están listos para jugar. Quien lo haga, dependerá de su estado de forma, de las necesidades del equipo y del juicio del técnico, quien podría seguir repartiendo minutos entre todos. Mientras, el club está inmerso en el lanzamiento de su álbum de cromos de esta temporada que saldrá en los próximos días a la venta en distintos puntos de Torrelavega y en el que estarán todos los jugadores y los respectivos cuerpos técnicos del club.
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