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Antonio Soares se dispone a rematar el balón en el partido del pasado sábado ante el Barcelona en Cabezón de la Sal. :: pedro bolado
Tranquilidad frente a urgencia
Voleibol

Tranquilidad frente a urgencia

El Textil Santanderina se enfrenta hoy a un Melilla que apura sus últimas opciones de clasificarse para la Copa del Rey

MARCO G. VIDART

Sábado, 9 de diciembre 2017, 18:51

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santander. Se suele decir que las prisas no son buenas consejeras. Y en esto del deporte, menos aún. El Melilla recibirá hoy (20.00 horas) en el pabellón Javier Imbroda al Textil Santanderina en un duelo de lo más desigual en cuanto a estados de ánimo. Los melillenses, con la obligación de ganar para apurar sus opciones de entrar en la próxima edición de la Copa del Rey. Y los cántabros, con la confianza de un buen momento en la Superliga Masculina y la certeza de que ya van poniendo puntos de por medio con la zona de peligro. Así, en el duelo de hoy se medirá la tranquilidad frente a las urgencias.

José Ignacio Marcos, el técnico de los cabezonenses, confía en que esas prisas por obtener la victoria de los locales les jueguen una mala pasada. Y así, de paso, compensen esa casi siempre existente diferencia de presupuesto y plantilla entre los demás equipos y el Textil. «El Melilla es uno de los presupuestos más altos de la Liga. Y están en la clasificación muy por debajo de lo que deberían». Esa billetera generosa es más que necesaria para mover a buenos jugadores a una ciudad sobre el papel menos apetecible que otras. A dos partidos de que se cierre la primera vuelta y se decidan los equipos que compiten por entrar en la Copa del Rey, el Melilla está a tres puntos del último pasaporte copero. «Necesitan ganarnos a nosotros por 3-0 o 3-1. Y aún así lo tienen complicado». La clasificación de la Superliga dice que el Melilla es séptimo con diez puntos y el Textil es octavo, a tan solo uno de su rival de hoy.

Castellanos, Júnior e Iribarne aparecen como las grandes amenazas de los melillenses para el Textil. La clave para hoy será «hacerles daño en su recepción». Además, el bloqueo del Melilla «flojea un poco», en contraposición al estado de forma del de los cabezonenses, que destrozó al Barça el pasado sábado en Cabezón en el último set.

Los cántabros han viajado de lo más contento a la ciudad autónoma. Lo primero, porque es un viaje de lo más llevadero. «Dos aviones, Santander-Madrid y Madrid Melilla». En pocas horas, allí, sin la habitual paliza de hora en autobús. Y también porque esa victoria del pasado sábado ante los culés -el cuarto clasificado- llenó de optimismo al grupo. «Y eso que empezamos perdiendo el primer set... Parece que lo hacemos adrede para darle emoción», apunta entre risas Marcos. La grada del Matilde de la Torre, animando a más no poder a los suyos, hasta fue motivo «de envidia» para el capitán del Barça, Sergi Arranz. Si todo un Fútbol Club Barcelona siente envidia del Textil Santanderina de Cabezón de la Sal es que las cosas van viento en popa para el equipo más humilde de toda la Superliga Masculina. Y eso sirve para afrontar partidos como el de hoy con la mayor tranquilidad y confianza del mundo.

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