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Ángel Viadero y sus jugadores ven ‘fantasmas’ cuando les toca jugar en los Campos de Sport.
Los demonios de El Sardinero
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Los demonios de El Sardinero

El Racing se ha dejado doce puntos en su estadio y en seis de sus ocho victorias terminó pidiendo la hora

Marcos Menocal

Sábado, 25 de febrero 2017, 07:56

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El Racing se enfrenta a su propios demonios cuando juega en El Sardinero.Suena a guión cinematográfico, pero es exactamente lo que le ocurre desde que comenzó la Liga sin apenas excepción. El equipo juega mañana en un escenario en el que se encuentra más arropado que nadie, pero en el que la obligación le maniata. Incomprensible. Hasta la fecha se ha dejado doce puntos, ha perdido dos partidos y ha ganado cuatro compromisos en los últimos cinco minutos, previa remontada milagrosa. Nadie puede explicar el sufrimiento que le invade los domingos por la tarde en su propia casa. Miedo escénico.

Racing y Red Cantabria firman un acuerdo

  • El Racing Club y Red Cantabria, que cuenta con 21 gasolineras en Cantabria y Castilla y León, han llegado a un acuerdo de colaboración para que los abonados de la campaña 2016/17 dispongan de condiciones especiales para llenar su depósito de combustible. Así, presentando el carnet verdiblanco de la presente campaña (y el DNI del titular) obtendrán un descuento directo de seis céntimos por litro de carburante siempre que el repostaje realizado supere los 25 litro. Este nuevo acuerdo, se encuanda en la política de colaboración que el club puso en marcha hace varias temporadas y a la que se han sumado numerosas empresas.

Mañana regresa a su potro de tortura. El Racing recibe al único equipo, el Osasuna B, al que ha ganado con solvencia y autoridad en todo el campeonato, eso sí, lo hizo de visitante. «Los filiales siempre se nos han dado mal; los chavales son impredecibles y marcan un ritmo a veces muy peligroso», recalcaba Ángel Viadero en la jornada de ayer. El compromiso de mañana es el aperitivo de un tramo de calendario determinante en el que el Racing no puede fallar; Tudelano, Ponferradina y Cultural Leonesa. Sin embargo, más allá de los rivales, lo que realmente le preocupa al cuerpo técnico es rendir a la perfección ante su público. Los nervios, la autoexigencia, la dificultad para llevar la iniciativa en los partidos... Existen múltiples variantes que convierten al equipo en una caja de sorpresas. Hasta la fecha, únicamente en dos envites saldó con suficiencia el marcador; ante el Pontevedra y el Burgos. Venció por idéntico resultado (0-2) y fueron las únicas tardes en las que los aficionados se fueron sin que el nudo de la corbata les estrangulara. El resto de comparecencias fueron de infarto. En ninguna de las otras once jornadas hubo respiro, hasta el punto de que en dos perdieron, Coruxo y Celta B (0-1), en otras tres no pasaron del empate todos a un gol Cultural, Arandina y Racing de Ferrol y, para colmo, en cuatro de las que lograron ganar tuvo que ser por la mínima y sobre la bocina. Sorprendente.

Basta echar un vistazo a las victorias para ponerse en guardia. Jornada 1, triunfo ante el Palencia por un solitario gol. Frente al Valladolid B y Tudelano, el Racing dio milagrosamente la vuelta al marcador (2-1) y venció en el minuto 88, con gol de Aquino, y en el 89, con tanto de Caye Quintana, respectivamente. Ver para creer. Lo mismo hizo contra el Izarra;se impuso 2 a 1 gracias a dos tantos en los minutos 74 y 79 y terminó sufriendo. Pero ahí no queda la cosa. Los de Viadero se impusieron por la mínima, 1-0, tanto al Guijuelo como al Lealtad, y los últimos instantes de partido acabaron encerrados en su propio campo, desdibujados por completo y con la grada de El Sardinero conteniendo la respiración. Lo mismo que les ocurrió ante el Racing de Ferrol (1-1) y la Arandina (0-0) con quienes sumaron un punto y dieron las gracias. Sufren y lo pasan mal cuando juegan en su casa y es algo que preocupa en el seno del vestuario.

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