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Dani Aquino, el jueves durante el entrenamiento de los Campos de Sport. :: MAría
Duelo de artilleros en Anduva

Duelo de artilleros en Anduva

El Racing visita al Mirandés en un cara a cara en el que la puntería de sus jugadores franquicia se prevé fundamental

ASER FALAGÁN

SANTANDER.

Domingo, 21 de enero 2018, 08:26

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Miranda de Ebro tiene mucho de cruce de caminos, como lo eran los viejos pueblos del oeste americano y sus tópicos duelos de pistoleros. Pero sin pistoleros. Pedazo de la provincia de Burgos incrustado en Álava y fronterizo con La Rioja, ha sabido configurar un orgulloso carácter propio. Por supuesto ni vascos ni riojanos, pero tampoco burgaleses puros de la capital. Solo mirandeses, como se llama también un equipo que orbita en torno a esta extrema identificación.

Lo de esta tarde es también una encrucijada, pero de otro estilo. Se encuentran dos equipos con dos trayectorias inversas que les han hecho converger en Segunda B. Los burgaleses, como ejemplo del trabajo serio que ha permitido a una ciudad de apenas 36.000 habitantes pasar un lustro en Segunda y ser tras su descenso uno de los equipos más ricos del grupo, aunque siguen sin gastar demasiado.

Los cántabros, como ejemplo de lo que el propio entrenador del Mirandés, un mito racinguista como Pablo Alfaro, define como todo el entorno verdiblanco como un «saqueo». Cuando Marcelino García Toral clasificó al Racing para la Copa de la UEFA el Mirandés estaba en tercera. Ahora sus caminos se cruzan cada ciertos años en una llamativa situación en la que los castellanos suelen ser quienes viven una situación más desahogada.

Viajar a Miranda de Ebro recuerda también a aquel partido de la nieve de hace tres años, cuando el Racing había regresado a Segunda y trataba sin éxito de reconstruirse antes de caer de nuevo al fútbol de bronce. Entonces muchos cántabros desafiaron al frío. Hoy también unos cuantos sufrirán el rigor mesetario en la desnuda grada de Anduva. Ni serán tantos ni nevará, pero se dejarán ver.

Pero lo de hoy es sobre todo un examen de suficiencia para Ángel Viadero y su Racing ante Pablo Alfaro, un técnico de su misma añada (1969) que también se cruza en su camino. El de Canalejas siente cómo su crédito se agota. Tres años seguidos en Santander pesan demasiado, el equipo evidencia dudas y el entrenador es siempre en estros casos el primero en resentirse. La semana pasada ni siquiera la victoria (eso sí, por la mínima y sin lustre) ante el modesto Gernika evitó que se despidiera al equipo con algunos pitos y que incluso la impenitente y entregada Gradona exigiera más compromiso.

Y lo de hoy será también un cruce entre dos pistoleros. O artilleros. Diego Cervero y Dani Aquino, dos jugadores franquicia de cuya actuación puede depender, y mucho, el rendimiento de sus equipos y, sobre todo, el botín. Con catorce tantos en Liga, el veterano atacante asturiano es una garantía para el Mirandés y ha firmado casi la mitad de los goles de su equipo. Ocho suma Aquino, que sin ser un goleador puro ha tenido que asumir esta función por segundo año consecutivo y ha sido junto a Óscar el único futbolista con olfato goleador de este titubeante Racing 2017-2018. Una situación que Higuera, Pachín, Viadero y compañía confían en revertir con la progresión de César Díaz y los dos refuerzos en la delantera.

El duelo entre dos equipos presionados cada uno a su modo por ascender adquiere además un punto más de intensidad por la irrupción del filial de Sporting, sorprendente líder del Grupo 2 de Segunda División B que dada la actual reglamentación podrá jugar en cualquier caso la fase de ascenso, independientemente de lo que haga el primer equipo. Así que ni siquiera el empate es una recompensa demasiado codiciada, puesto que daría a los yogurines la oportunidad de distanciarse de sus competidores, que ahora tiene a cinco y a ocho puntos, después de ganar ayer al Leioa por 1-0 en Mareo.

Como ya hizo la semana pasada, Viadero echará mano en este segundo examen de su vieja guardia. No porque lleven mucho tiempo en un club que cambia demasiado de caras, sino porque se encomendará a todos los veteranos y barones del vestuario salvo el sancionado Borja Granero.

La defensa será la que al empezar el curso parecía titular e inmutable, más allá de lesiones y sanciones: Córcoles, Regalón, Gonzalo de la Fuente y Julen. Con un doble pivote defensivo integrado por Antonio Tomás y Sergio Ruiz, las bandas las ocuparán Óscar, un futbolista que se ha hecho imprescindible a base de goles, asistencias y desbordes y Álex García, que parece haber arrebatado el puesto en la banda izquierda a un Héber cuyo rendimiento ha caído. En la delantera, Dani Aquino y César Díaz, con Juanjo de nuevo en el banquillo, como también lo estará el recién llegado Acosta.

Pocas bajas tiene también el Mirandés. Una sola, para más señas, pero nada menos que la de Yanis, su referencia en banda izquierda. Alfaro sí tendrá a su disposición al exracinguista Israel Puerto, al que se le ha levantado su sanción tras habérsele retirado la segunda tarjeta amarilla que vio ante el Sporting B, pero si el técnico rojillo sigue con su política habitual de rotaciones en el centro de la defensa el zaguero andaluz se quedará en el banquillo, cruzando miradas con sus excompañeros o viendo los tiros desde el porche, acodado en una mecedora. Quizá el sitio más seguro, porque a quien pierda hoy el duelo no le pinta, como en los viejos westerns, nada bien.

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