Los trabajadores de Lidl no quieren congelar su antigüedad ni trabajar cualquier domingo

"No vamos a aceptar bajo ningún concepto este cambio porque empeora considerablemente las condiciones laborales de los trabajadores", explica en una nota Carlos Fernández, presidente del comité de empresa de Lidl en Cantabria.

Este martes se decidirá todo. Se reúnen en el Orecla ambas partes y el comité de empresa exigirá que se mantenga la apertura de las tiendas los domingos tal y como está ahora, es decir, solo se abrirá los domingos autorizados por el Gobierno de Cantabria más las aperturas festivas fijadas por ley, desde el 15 de julio hasta el 15 de septiembre. "Es totalmente excesivo que nos obliguen a trabajar todos los domingos", denuncia con dureza Fernández.

Tampoco están dispuestos a renunciar a su antigüedad. "Es un derecho conseguido tras mucha lucha para que ahora vengan y nos lo congelen".

Pero aquí no terminan las quejas de los trabajadores. El nuevo convenio de empresa reduce los días de vacaciones, modifica la jornada laboral, y elimina el plus de cierre y las pagas de los 20 y de los 25 años de antigüedad.

En caso de que al final no se llegue a un acuerdo de concilación este martes en el Orecla, el comité ya tiene preparado el plan de protestas. El 30 de mayo frente al supermercado Lidl del Primero de Mayo. Y el 2 de junio frenta a la tienda de la empresa en el polígono de Los Ochos, en Torrelavega. "Las protestas continuarán si no se respetan las condiciones mínimas que exige el comité de empresa" advierte Fernández, quien recuerda también a la dirección que en el País Vasco se han respetado sus condiciones laborales previas a la firma del convenio de empresa.

Los trabajadores cántabros son los primeros y los únicos empleados de Lidl que se oponen a la firma de un convenio de empresa. Su postura ha sido aplaudida en otras comunidades y, tal y como indica el presidente del comité de empresa de Lidl Cantabria, sirva para que otros compañeros se sumen.