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reuters/EP
Sábado, 13 de febrero 2016, 11:40
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El primer ministro de Rusia, Dimitri Medvedev, ha expresado este sábado su rechazo contundente a las acusaciones formuladas por su homólogo francés, Manuel Valls, de estar bombardeando a civiles durante la campaña aérea rusa en Siria.
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"Simplemente es mentira. No hay pruebas de que estemos bombardeando civiles aunque todos nos acusen de hacerlo", ha lamentado Medvedev desde la Conferencia de Seguridad de Múnich 2016, solo minutos después de que Valls realizara esta acusación desde el mismo estrado.
De igual modo, el primer ministro ruso aseguró que el interés de Rusia en la guerra siria sirve únicamente a propósitos de defensa nacional. "No estamos intentando alcanzar un objetivo secreto. Simplemente estamos intentando proteger nuestros intereses nacionales", ha mantenido.
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