El ajedrez se implanta como asignatura en Astillero

El colegio San José es uno de los centros donde se imparte desde hace años esta disciplina. El aprendizaje de ajedrez en el centro comenzó en el curso 1997-1998 con la colaboración que establecieron Teresa Martínez (profesora) y Jesús Boo (Club de Ajedrez Astillero) para introducir esta actividad en la dinámica escolar. Fue en el año 2015 cuando el centro se acogió a la convocatoria del Proyecto de Innovación de Ajedrez Educativo de la Consejería de Educación.

Según explicó el director pedagógico del colegio San José, Miguel Ángel Lavín, «nos encontrábamos con que el alumnado mostraba y muestra dificultades para concentrarse, prestar atención, visualizar, analizar su entorno y tomar decisiones». Por eso, en el centro, que apuesta por trabajar y plantear acciones didácticas que ejerciten todas estas habilidades, decidió utilizar el ajedrez como recurso y herramienta pedagógica para fomentar entre el alumnado «aspectos cognitivos, de personalidad, sociabilidad y un sin fin de valores».

En el San José, el proyecto Ajedrez Educativo está dirigido al alumnado de 5º y 6º de Primaria, por lo que participan en él un total de 104 alumnos. Aunque no es evaluable, sí se hacen pequeñas pruebas de demostración de conceptos. En este caso, la actividad se introduce dentro de la asignatura de matemáticas, en una sesión por semana, y en ella intervienen cuatro tutores y dos profesores de apoyo. Además, hay un torneo escolar que se desarrolla en los meses de febrero y marzo, también en jornada lectiva.

En el colegio Puente III de El Astillero el ajedrez también lleva varios cursos -desde el 2015-2016- instalado en las aulas pero, en este caso, como asignatura propia, y por tanto, aunque no conlleva exámenes como tal, el alumnado sí que tiene que demostrar lo aprendido a través de ejercicios evaluables. En este sentido, el coordinador del proyecto de Ajedrez Educativo del centro, Javier López, indicó que «son indudables los beneficios de la enseñanza del ajedrez en alumnos como herramienta educativa» y, por ello, dijo, «la escuela es el lugar propicio para su aprendizaje y práctica».

Para el coordinador del colegio Puente, la práctica del ajedrez por parte del alumnado aporta innumerables beneficios cognitivos y sociales. «La memoria, no solo se limita a recordar el movimiento de las piezas y las reglas básicas, sino que aprenderá jugadas, estrategias y recordará lances anteriores; la capacidad de concentración, hay que centrar voluntariamente toda la atención sobre las piezas del juego; atención y reflexión, los alumnos con problemas de atención, tienen en el ajedrez un juego propicio para mejorarla ya que necesitan atención en las fichas y en el tablero; la toma de decisiones y aceptación del error, el ajedrez hace al individuo responsable de sus actos, se toman decisiones continuamente unas afortunadas y otras no; visión espacial y temporal; resolución de problemas; pensamiento creativo o razonamiento lógico-matemático». En los tres años en los que el ajedrez educativo ha formado parte de las asignaturas del cuarto curso ya la han cursado más de 80 alumnos, de los cuáles, 23 lo están haciendo actualmente.

En el colegio José Ramón Sánchez, el ajedrez se ha introducido por primera vez en el currículum este curso, a pesar de que siempre ha estado presente en el centro como actividad extraescolar con una elevada demanda. «Se utiliza como un elemento metodológico en el área de matemáticas», indicó la coordinadora Mónica Gerez. «Pensamos que el ajedrez educativo podría ayudar a nuestro alumnado en el desarrollo de estrategias mentales, valores y resolución de problemas y por eso apostamos por su introducción este curso», apuntó Gerez.

En estos momento, el colegio público lo lleva a cabo entre alumnos de 5º y 6º de Primaria durante el segundo trimestre, con una dedicación de una hora semanal cada uno de los cursos. En total, 110 niños participan.

Otro colegio público, el Fernando de los Ríos, también lo ofrece pero como asignatura extraescolar.