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El uso de los antiguos juzgados aún está por decidir por el equipo de gobierno que no descarta su venta. Daniel Pedriza
El futuro que le espera a la Plaza de la Villa

El futuro que le espera a la Plaza de la Villa

La peatonalización de este céntrico espacio y el destino que se le dé al edificio de los antiguos juzgados dinamizarán este enclave como antaño

Ana Cobo

Santander

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Jueves, 19 de octubre 2017, 07:57

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La Plaza de la Villa no hace honor a su nombre. Este céntrico espacio se ha reducido desde hace muchos años a un mero lugar de tránsito y aparcamiento de vehículos que dista bastante de ser lo que se entiende comúnmente como una plaza.

A finales del siglo XIX y principios del XX este lugar gozó de una intensa actividad acogiendo los mercados semanales de frutas y hortalizas al ser la única plaza por entonces existente. En este enclave también se situó la sede del Ayuntamiento de Santoña en el edificio que después albergó los juzgados y que, actualmente, se encuentra vacío. Más cerca en el tiempo, muchos vecinos recordarán que para tomar el autobús había que ir hasta la Plaza de la Villa donde se recogía y dejaba a los pasajeros. Todo eso ya es pasado.

Ahora mismo, solo es un lugar de paso de peatones y vehículos, que también hacen uso de esta plaza como lugar de estacionamiento. Esta postal urbana va a cambiar en los próximos meses. El Ayuntamiento de Santoña ha puesto sus miras en la Plaza de la Villa para darle un cambio de imagen que pasará por su peatonalización, siguiendo el ejemplo ejecutado en la remodelada Plaza de Abastos. El otro elemento que puede contribuir y, mucho, a dinamizar este espacio es el edificio de los antiguos juzgados. El equipo de gobierno no tiene aún definido el destino de este inmueble de cerca de 1500 metros cuadrados. Tras concluir su etapa como sede judicial se le abre un nuevo horizonte.

«Tras las obras del Gobierno la primera y segunda planta están en buena condiciones, pero quedan trabajos por hacer en la tercera y cuarta»

Antes de pensar en ese futuro uso, aún quedan muchas cosas por hacer en el interior del edificio. El Gobierno de Cantabria ha llevado a cabo unas obras de rehabilitación mínimas en su fachada, tejado y alguna de sus salas para revertirlo al Consistorio en unas condiciones dignas. No obstante, el inmueble exige de más trabajos de reforma, sobre todo en sus plantas tercera y cuarta. En ese sentido, el alcalde, Sergio Abascal, espera que el Ayuntamiento pueda acogerse a futuras órdenes de subvenciones del Ejecutivo cántabro para rehabilitación de edificios y así concluir la restauración de los espacios que quedan pendientes.

Recientemente, el consejero de Presidencia y Justicia, Rafael de la Sierra, se cercó hasta la villa para girar una visita al edificio y comprobar las obras básicas acometidas por su departamento a demanda del Consistorio. Durante el recorrido estuvo acompañado por el alcalde, Sergio Abascal, y los ediles, Fernando Palacio y Moisés Cué, que comprobaron el estado de todas las instancias.

Abascal explicó que los trabajos han servido para actuar en las zonas más deterioradas como la fachada, protegida por el Plan General de Ordenación Urbana; la azotea, que presentaba humedades que han sido eliminadas por completo; y las terrazas exteriores, que han sido remodeladas. Otras actuaciones interiores han estado encaminadas al arreglo de suelos de madera, pintado de paredes, sustitución de luminarias de los falsos techos y la creación de espacios más diáfanos eliminando algunas paredes y tabiques.

Los trabajos se han centrado básicamente en la primera y segunda planta que, junto a la planta baja «se encuentran en unas condiciones buenas». Por ello, ahora todos los esfuerzos se deben centrar en restaurar la tercera y cuarta planta. «El Ayuntamiento tratará de buscar la fórmula adecuada para dar un servicio a este edificio para lo que demandaré la colaboración del Gobierno autonómico de cara a seguir rehabilitando las zonas que faltan con trabajos de acabado y estéticos».

En cuanto al uso que se le va dar a este edificio, Abascal solo habla de posibilidades, sin llegar a descartar incluso su venta. No obstante, cree que todas las opciones que se planteen deberán ser abordadas con el resto de la Corporación para acordar de forma unánime un destino definitivo ya que «estamos hablando del patrimonio de Santoña». Entre las ideas que se barajan está el traslado provisional de la escuelas de pintura y de música ya que actualmente se desarrollan espacios municipales que se quedan pequeños para su actividad. Más a largo plazo también se ha pensado en que pueda acoger la Escuela de Adultos, los cursos de la Escuela Oficial de Idiomas de Inglés o albergar las sedes de colectivos vecinales como el de las amas de casa.

El futuro de la Plaza de la Villa también pasa por la peatonalización de este espacio. El Consistorio tiene claro que buena parte de la subvención de 425.000 euros que le ha correspondido dentro de la convocatoria de ayudas del Gobierno de Cantabria para financiar obra municipales ira a parar a este enclave.

Peatonalización

De hecho, ya se han dado pasos para este proyecto. «Hemos pedido a un arquitecto, el mismo que diseñó la peatonalización de la Plaza de Abastos, un avance de cual sería su proyecto para este lugar y el coste que supondría. El documento incluirá infografías para determinar el alcance de la actuación y los servicios que se van a realizar».

La obra contempla la peatonalización de este espacio que implicará el soterramiento de contenedores, alguna reestructuración del tráfico que pasaría por la reducción de estacionamientos y ampliación de espacios públicos con alguna pequeña zona verde, bancos y una fuente. Al igual que la Plaza de Abastos quedaría abierta al tráfico, es decir se permitiría la circulación de vehículos aunque se estudiará el mantener el doble sentido de entrada y salida por la calle del Duque. La obra tiene como objetivo «revitalizar este espacio que ahora mismo no tiene vida, solo es una zona de aparcamiento y tránsito de vehículo. La idea es potenciar este entorno», remarca Abascal.

El Ayuntamiento tiene hasta el 29 de diciembre para presentar el Gobierno de Cantabria el proyecto redactado de la Plaza de la Villa así como otra actuaciones que quiera ejecutar con la subvención que recibirá. Y las obras deberán estar adjudicadas antes del 30 de junio de 2018 y ejecutadas como muy tarde antes del 31 de octubre de 2019.

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