"La Grúa de Piedra no se mueve"

Ahora, el objetivo es restaurar la Grúa, «si es posible, antes de la inauguración del Centro Botín», agregó. Pero para ello, previamente hay que redactar el proyecto y sacarlo a licitación, por lo que el jefe de mantenimiento del Puerto, José Antonio Elices, señaló que podría estar lista «para finales de año, nunca antes de otoño».

El presidente de la Autoridad Portuaria también quiso aclarar que «nos estamos anticipando a algo que ya estaba previsto: la completa rehabilitación de la Grúa de Piedra, como parte esencial e icónica del patrimonio portuario». «Quiero dejar claro añadió que nosotros somos la única autoridad que tiene competencia para decidir sobre esta veterana máquina».

Lleva anclada al muelle de Maura desde 1896, cuando fue construida por Sheldon y Gerdtzen como consecuencia de un plan de mejoras de la costa norte de la bahía de Santander. Pesa treinta toneladas y consta de catorce metros de altura.

González aseguró que Puertos del Estado tiene desde hace un tiempo un plan de reforma que incluye, además de la Grúa, el Palacete del Embarcadero, el Faro de Cabo Mayor, así como otros de la costa Cantábrica que están bajo su responsabilidad. Para todo ello, añadió, «ya existe una partida económica».

El inicio de estos trabajos está previsto para el mes de abril. «Empezaremos por el Palacete, pero su trabajo de rehabilitación es mucho menor y más fácil, con lo que la inversión tampoco tendrá nada que ver». En cuanto a los faros, «ya hemos comprobado qué necesidades de mantenimiento tienen. Como la partida económica ya está asignada, tenemos el compromiso con Puertos del Estado de acometer todos estas operaciones», aclaró.

Pero, a pesar de los planes hechos, «los trabajos se van a anticipar. Hay que tener en cuenta que no vamos a hacer nada que no estuviera ya previsto», indico Gutiérrez.

Sobre el tiempo que tardará la Grúa en presentar de nuevo su imagen original, no quiso aventurarse. Recordó que primero hay que desmontar toda la estructura y llevar todas las partes a una nave del Puerto. Además, se contratarán unos buzos para que rescaten los contrapesos que cayeron al mar.

«No va a primar tanto la velocidad en su rehabilitación como que la Grúa vuelva a ser un fiel reflejo de lo que fue históricamente», apuntó. En cuanto al posible coste de todo ello, González indicó que «aún es pronto para saberlo. Ni siquiera tenemos un informe técnico, ya que las piezas, todavía no están todas en la nave habilitada para guardarlas». En principio, la intención era mantener la cabina sobre la base de piedra, aunque «se está estudiando qué tipo de restauración va a precisar. Todo indica que será necesaria más que una mano de pintura, ya que el interior también está degradado, por lo que no descartamos que tenga que ser desplazada como el resto a la nave».