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María de las Cuevas
Viernes, 28 de abril 2017, 07:35
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La comunidad mormona de Santander, formada por un os 400 miembros, ya tiene templo para su culto religioso. Se trata de un centro de reunión para el culto eclesiástico y para otras actividades formativas, campañas solidarias y eventos deportivos que darán servicio a toda la comunidad. El edificio fue inaugurado ayer, y el acto contó con la presencia de la alcaldesa de la ciudad, Gema Igual.
Con este nuevo edificio, «deseamos darnos a conocer ya que somos parte de la comunidad. Queremos colaborar con el Ayuntamiento, Gobierno regional y vecinos», resaltó Israel Jiménez, project manager de la Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días, más conocida como iglesia mormona.
El edificio está situado en La Albericia, junto a la S-20, muy próximo al tanatorio Nereo Hermanos. Es una réplica de la iglesia original de Utah, donde surgió esta fe. Mantiene las mismas proporciones y volúmenes; cuenta con una torre y en el interior hay 20 salas multifuncionales así como la sala sacramental para los actos eclesiásticos con la pila bautismal. Ocupa 1.000 metros cuadrados, sobre una parcela de 5.200 metros delimitada por las calles El Hondal, La Tesilla, Los Barbajos y El Robejo, junto al tanatorio. El presupuesto ronda los 2,2 millones de euros, financiado con fondos propios, y ha sido construida por la empresa cántabra Teginser, del grupo Pertero.
Los mormones llegaron a Santander en 1976 a través de seis misioneros procedentes de Estados Unidos y el primer cántabro en recibir el bautizo de esta creencia fue Fernando Salgado Ortiz, en 1977. Desde entonces «hemos sido invisibles reuniéndonos en un reducido bajo de un edificio. Por eso, esta inauguración es algo muy esperado», explicó Julia Aranguren, responsable de Asuntos Públicos en Cantabria.
El templo se concibe como «un edificio multidisciplinar, donde niños, jóvenes y adultos podrán desarrollar habilidades para encontrar el propósito de sus vidas», explicó Saulo Franco, presidente de estaca, lo que sería el equivalente a un arzobispado en la Iglesia Católica.
En sus veinte salas se desarrollan campañas solidarias que ya realizaba esta congregación, como punto de donación de sangre para unidades de Cruz Roja, confeccionar mantas para el Centro de Acogida Princesa Letizia; donación de almohadillas para mujeres con cáncer de pecho a través de convenios con hospitales de la región, o llevar a cabo diversas campañas de ayuda a refugiados.
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