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Un hombre camina entre el Paseo del Niño y la calle José Gutiérrez Alonso.
Vecinos del entorno del Paseo del Niño se quejan de la proliferación de ratas

Vecinos del entorno del Paseo del Niño se quejan de la proliferación de ratas

La existencia de edificios cerrados y sin ningún mantenimiento, la cercanía de las vías de tren y la proximidad de zonas industriales pueden ser las causas

David Carrera

Jueves, 11 de mayo 2017, 07:22

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Dicen los vecinos que no se esconden, ni huyen alertadas por la presencia humana. A plena luz del día, y también por la tarde, se les puede ver pasar de un lado a otro por las inmediaciones del Paseo del Niño y las calles colindantes. Transitan, incluso, en pareja en busca de algo que llevarse a la boca. Son capaces de meterse en comercios y almacenes aprovechando cualquier rendija. Los vecinos y comerciantes muestran sus quejas por la presencia de ratas, "algunas de gran tamaño", según explican, en las calles Calderón de la Barca, Pancho Cossío, y en el Paseo del Niño pero sobre todo en José Gutiérrez Alonso. Lo confirman los trabajadores del servicio de limpieza viaria, cuyos operarios también han sido testigos, durante sus labores diarias, de su corretear. "Se ven algunas", aseguran, aunque apuntan que "va por temporadas".

Su presencia ha desatado el malestar de vecinos, comerciantes y hosteleros de estas áreas. La musofobia repulsión que provocan los roedores hace el resto. Desde el Ayuntamiento quitan hierro al asunto y evitan hablar de plaga. "Es un problema recurrente desde hace años y de difícil solución, no creemos que haya proliferado, pero con el buen tiempo y probablemente la ausencia de lluvias ha coincidido que se han visto más en la calle", argumentan. No obstante, en el área ya están tomando medidas con carácter inmediato.

Los técnicos municipales sitúan los focos más conflictivos junto a las zonas verdes y en los alrededores del Paseo del Niño y la calle Pablo Garnica donde hay varias fincas abandonadas con la presencia de abundante maleza y basura acumulada. El veterinario y director del Mercado Nacional de Ganados, Isaac Bolado, explica que el Ayuntamiento realiza distintas campañas de desratización a lo largo del año a través de la empresa adjudicataria del servicio, Montañesa de Desinfección. Además, recuerda que se realizan actuaciones puntuales "siempre que el Ayuntamiento o el propio Ferial de Ganados recibe la llamada de un vecino denunciando la presencia de ratas en espacios públicos". Según explica, se actúa a lo largo de todo el año en la red de saneamiento con la colocación de cebos en todos los barrios de la ciudad como medio preventivo para mantener las poblaciones a raya, además de atender las denuncias concretas que llegan desde las diferentes zonas donde se detecta un problema. En cuanto a la proliferación de roedores en determinados barrios, Bolado advierte que "el problema es complejo y requiere de estas campañas que se completan con el sistema de actuaciones puntuales" pero "es que además influyen otros factores como son las propias condiciones ambientales".

También cuando hay obras en los alrededores con el correspondiente movimiento de tierras, es otros factor que influye a la hora de que prolifere la presencia de ratas. En concreto, en los alrededores del Paseo del Niño, Rosario Verduga, del departamento técnico de Montañesa de Desinfección, indica que se trata de una zona de Torrelavega en la que la presencia de algunas naves y viviendas con solares abandonados, la proximidad de las vías del tren, y la cercanía de actividad industrial "son algunas de las causas por las que los roedores eligen este lugar para anidar y reproducirse". Verduga considera que el avistamiento de un mayor número de ejemplares en los últimos días puede estar relacionado con la época de cría "cuando las hembras se muestran más agitadas". Es consciente de que en esta parte de la ciudad, separada del centro por las vías del tren, las ratas salen de las arquetas "donde además de las campañas periódicas hemos actuado en otras ocasiones alertados por los vecinos que nos dicen que las ven por las calles, junto a los contenedores de basura y entre los coches".

Casas abandonadas

Los vecinos culpan de la proliferación de roedores a la existencia de algunas casas abandonadas en las inmediaciones, que se encuentran cerradas desde hace años sin que nadie se ocupe de su mantenimiento. María Ángeles Argumosa, presidenta de la Asociación de Vecinos del Paseo del Niño, dice que ya han hablado con la Concejalía de Medio Ambiente "y han venido a echar veneno pero parece que en algunas calles siguen saliendo de las alcantarillas". Adrián Fernández, de la tienda especializada en venta de semillas Ganesh Grow, relata que hace unos días "tuvimos que echar una de la tienda a patadas porque se nos había colado por la puerta". De hecho han tenido que tomar medidas y poner unos relieves para evitar "visitas inesperadas". También en un negocio cercano, Fontanería Becerril, ubicado en la calle José Gutiérrez Alonso, se han topado con la presencia de ratas. "Algunas de buen tamaño subrayan pero ahora también se ve más gatos por los alrededores". Su teoría es clara: "Si hay gatos por es que hay ratones".

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