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La conflictividad judicial ha dominado el primer año del Parque de Bomberos camargués.
Camargo supera los 35 pleitos desde la creación de su Parque de Bomberos

Camargo supera los 35 pleitos desde la creación de su Parque de Bomberos

Tres trabajadores han promovido 25 procesos judiciales contra el Ayuntamiento, que ya ha gastado más de 35.000 euros en los tribunales

Jesús Lastra

Martes, 23 de mayo 2017, 17:02

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Cuando en junio de 2016 el Ayuntamiento de Camargo aprobó en Pleno la creación de su nuevo Servicio de Extinción de Incendios, los motivos fueron puestos sobre la mesa sin tapujos. El acuerdo tenía como finalidad principal la asunción de la sentencia del Juzgado de lo Social nº 2 de Santander de octubre de 2014 por la que los tribunales reconocieron una relación laboral con el Consistorio a 17 voluntarios de la extinta Agrupación de Protección Civil, una resolución ratificada en 2015 por el Tribunal Superior de Justicia de Cantabria (TSJC) y, ya en 2016, aquilatada por el Supremo al no admitir la reclamación municipal. Un pleito fue, en definitiva, la génesis del actual Parque de Bomberos ubicado en el Polígono de Trascueto. Lo que seguramente no imaginaba el Gabinete que dirige Esther Bolado es que la Justicia sería una compañera de viaje habitual durante el primer año de existencia del complejo de emergencias situado en Revilla.

Al menos 35 procesos judiciales suma el Ayuntamiento con sus empleados como consecuencia del nuevo servicio, lo que ha llevado a la tesorería local a pagar ya más de 35.000 euros en los diferentes gastos derivados de tener que hacer frente a litigios de este tipo.

Llama la atención especialmente que de los 35 procedimientos contabilizados por la Casona, hasta 25 los concentran tres trabajadores, incluido el actual jefe del Parque. Como ejemplo, un único trabajador incorporado el pasado verano, al igual que el resto de los 14 exvoluntarios que firmaron su contrato laboral indefinido pero no fijo con la Casona, ha interpuesto 12 demandas en la Jurisdicción de lo Social.

Se da la circunstancia, además, de que de estos 25 procesos que concentran tres trabajadores, varios se han saldado por desistimiento de la parte demandante, incluso por no comparecer en los juicios.

Entre los motivos que han llevado a Camargo y a sus bomberos a convertirse en unos asiduos de los Juzgados de lo Social situados en la calle Alta de Santander aparecen modificaciones de condiciones laborales o vacaciones, así como reclamaciones de cantidades pendientes o solicitud de indemnización por despido.

Porque la reclamación de cantidades aún sin abonar también es objeto de conflicto en otros ocho casos con siete trabajadores, al entender los reclamantes que el Ayuntamiento debe girarles ciertas cantidades después de que los tribunales reconocieran que algunos voluntarios estaban prestando un servicio profesional en lugar de una labor altruista compensada con dietas, y el correspondiente cierre de la Agrupación de Protección Civil a comienzos de 2016 precisamente para acabar con un modelo de funcionamiento que ha obligado a la Casona a incorporar a 14 personas. Otros tres voluntarios presentaban incompatibilidades y no pudieron firmar su contrato laboral con Camargo. Estas últimas solicitudes llevarán a que el municipio siga inmerso en litigios hasta casi acabado 2017, pues la última vista oral de las señaladas hasta la fecha se prevé para noviembre.

Más causas

Los pleitos laborales no completan todo el panorama judicial de Camargo por su Servicio de Extinción de Incendios. La Oferta de Empleo para cubrir las plazas de forma definitiva con un concurso oposición también ha sido llevada al juzgado de lo contencioso-administrativo, al igual que la Relación de Puestos de Trabajo del Parque de Trascueto.

Como complemento, aunque aparte de todo este listado de pleitos, también aparece el conflicto mantenido con otros 22 voluntarios de Protección Civil que pretendían una relación laboral al igual que sus otros 17 compañeros. Sin embargo, el TSJC ha declinado recientemente tal pretensión al no ser el caso igual que el de los actuales bomberos.

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