Borrar

Necesitas ser suscriptor para acceder a esta funcionalidad.

Compartir

En el mundo de la gastronomía hay dos caminos que discurren prácticamente paralelos: la rutina aderezada por el conformismo y las nuevas tendencias impulsadas por las inquietudes y las ganas de progresar y de agradar al cliente. El primero de los caminos no está asfaltado y está lleno de curvas que llegan a marear e incluso a aburrir; el segundo es una autovía de experiencias y de conocimientos que luego se plasmarán en el plato. Este tiene su máxima expresión en eventos como Reale Seguros Madrid Fusión (RSMF). Aquí, en un Palacio de Congresos de Madrid que se ya queda pequeño, entre tanto bullicio, se palpa profesionalidad, pulso, talento emergente, intercambio de ideas, comunicación activa...

Comenzó ayer RSMF a lo grande y con un lleno 'hasta la bandera', como se pudo comprar en la esperada ponencia de Ferrán Adrià. El mago de Cala Montjoi volvió a cautivar al público con reflexiones preñadas de lógica y fruto de unos años de análisis que le han convertido es un excelente comunicador. Adrià es un volcán de ideas, se entusiasma y razona cada fase de su nuevo proyecto, ya no se atropella hablando como antes, sino que se mueve muy cómodo en el escenario, sin papeles. Fundamenta una gran parte de su visión global de la cocina del presente y del futuro en la historia, apela sin contemplaciones a la importancia que tiene el trabajo en la sala del restaurante y apuesta por los equipo interdisciplinares, desde arqueólogos hasta filósofos.

Ferrán ya fue un adelantado a su tiempo y, ahora, ocho años después de su última comparecencia en este tipo de foros, volvió a demostrar que tiene visión y que seguirá marcando tendencias desde múltiples ángulos.

Reporta un error en esta noticia

* Campos obligatorios