Sancionados siete jóvenes por hacer una fiesta en una zona común de un edificio de General Dávila
Además, la Policía Local ha multado a ocho responsables de viviendas de Santander por juergas nocturnas que molestaban a los vecinos
La Policía Nacional ha sancionado a cinco adultos y dos menores que ayer domingo realizaron una fiesta en una zona común de un edificio de la calle General Dávila de Santander. Estas siete personas -cinco varones y dos mujeres, todos muy jóvenes- fueron sancionadas por la Policía Nacional, que acudió al ser alertada por un vecino que avisó al 091 al ver a un grupo de chicos reunidos en el patio interior sobre las seis de la tarde. Los agentes los sancionaron a todos por incumplir las medidas decretadas en el estado de alarma por la emergencia sanitaria del coronavirus COVID-19, según ha informado hoy la Delegación del Gobierno en Cantabria, que también destaca que son hechos «aislados y la mayoría de la ciudadanía de Cantabria está demostrando una gran responsabilidad». Pero a raíz de estas situaciones, las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad han insistido en la necesidad de «perseverar» en el cumplimiento de las medidas del estado de alarma.
Ocho fiestas nocturnas en pisos con sanción
Esta fiesta en la zona común de un edificio, en la que intervino la Policía Nacional, se suma a otras muchas detectadas dentro de viviendas particulares de Santander durante este fin de semana que, aunque no infringen el estado de alarma, sí que incumplen la 'Ordenanza Municipal sobre protección de la convivencia ciudadana y prevención de actuaciones antisociales', que en Santander contempla multas desde los 750 hasta los 3.000 euros. Cada lunes, la Policía Local envía a los medios su parte de actuaciones y hoy, otra vez, vuelve a verse una larga lista de sancionados «por ruidos en viviendas».
Son, exactamente, ocho las fiestas nocturnas en las que irrumpieron los agentes desde el viernes tras recibir quejas de vecinos, algunas a altas horas de la madrugada y otras no tanto. El viernes, a las 23.00, fue denunciada F.G. porque tenía «música en tono elevado» en su casa de la calle Juan José Ruano. Solo quince minutos después, la Policía interrumpió otra fiesta en la calle Jesús de Monasterio, donde fue denunciada P.S., la responsable, «por música y voces en tono elevado». Esa misma noche, ya de madruda (las 02.25 horas), los agentes acudieron a la calle Río de la Pila y denunciaron al responsable de una vivienda (A.S.) por los ruidos que generaba una fiesta en su casa. Más tarde aún (a las 05.30), fue denunciado D.V. por molestar a los vecinos por música y voces en su casa de Cardenal Cisneros.
Al día siguiente, en la madrugada del sábado al domingo, hubo otra intervención en el Pasadizo Cervantes por lo mismo (fue denunciado H.R. a las 01.10 de la noche), otra más en la calle Del Medio a las 02.45 horas donde se denunció a F.G., y cinco minutos después los agentes estaban en otra casa de la calle Carlos Haya, donde fue denunciado L.A. Por último, hubo que volver a la calle Del Medio por otra fiesta distinta a las 05.15 horas, donde fue denunciado por el responsable de la vivienda (V.M.).
8.577 propuestas de sanción por incumplir el estado de alarma
Hasta este domingo, la Policía Nacional, la Guardia Civil y las policías locales han instruido en Cantabria un total de 8.577 propuestas de sanción y han detenido a 147 personas por incumplimientos graves. Entre el viernes y el domingo se han levantado un total de 627 actas de sanción y han sido detenidas 17 personas. Durante el fin de semana, la jornada con más detenidos y propuestas de sanción fue el viernes, con nueve y 235, respectivamente.