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El TSJC obliga a la residencia de Carrejo a readmitir a un trabajador por vulnerar su libertad sindical

El TSJC obliga a la residencia de Carrejo a readmitir a un trabajador por vulnerar su libertad sindical

El empleado deberá recibir también una indemnización de 6.000 euros

DM .

Santander

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Miércoles, 3 de febrero 2021, 13:06

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El Tribunal Superior de Justicia de Cantabria ha ratificado como nulo el despido de un auxiliar de enfermería de la residencia Sagrada Familia de Carrejo, en Cabezón de la Sal, que deberá readmitir al trabajador, abonarle los salarios que ha dejado de percibir desde el cese de la relación laboral -diciembre de 2019- y hasta que sea efectiva su incorporación, e indemnizarle además con 6.000 euros.

Así consta en una sentencia de la Sala de lo Social del TSJC que desestima el recurso presentado por la empresa contra el fallo dictado por el Juzgado de lo Social número 6 de Santander en agosto de 2020.

La resolución, difundida por Trabajadores Unidos -el afectado es delegado de TU en el centro-, concluye que «ha quedado probada la vulneración del derecho fundamental a la libertad sindical», por lo que se considera «procedente la reparación del daño» y se reconoce la citada indemnización.

Hechos

El alto tribunal cántabro señala que el demandante empezó a trabajar en la residencia en mayo de 2003 como auxiliar de enfermería y hasta diciembre de 2019, cuando la empresale comunicó la incoación de un expediente disciplinario al que siguió la carta de despido, «disciplinario».

La empresa alegaba diferentes supuestos que habían constituido «faltas graves y muy graves» por parte de este empleado, como que un día, mientras prestaba servicio en el comedor, «fue observado junto a otras compañeras ajeno a sus obligaciones de vigilancia, supervisión y atención a los residentes», que estaban «desatendidos» mientras él permanecía «enfrascado en una conversación trivial».

Así, una de las usuarias, con «severos problemas de autonomía y movilidad», se levantó de su asiento y empezó a deambular por el comedor sin que el implicado la «prestara atención», hasta que cayó de espaldas al suelo, sin consecuencias «serias» aunque el resultado «pudo ser mucho más grave» e incluso «fatal».

La residencia también esgrimió una actitud «inadecuada» del profesional con los residentes, «brusca y desproporcionada» en el trato o por no adoptar medidas de protección -barras de seguridad- ante la aparición de golpes y hematomas en usuarios. Y argumentó además «presiones y coacciones» a una enfermera cuando «evidenciaba la desatención de sus tareas».

Por su parte, en la sentencia se pone de manifiesto que el demandante fue uno de los firmantes de una petición de reunión con la directora de la residencia para exponer las «inquietudes» ante decisiones que «influían en los niveles de calidad de asistencia» a los ancianos, o que apoyó la recogida de rúbricas para asambleas extraordinarias de auxiliares de enfermería, una para la convocatoria de una huelga y otra para la revocación del comité de empresa.

Además, el sindicato TU, al que representa este trabajador en la residencia, denunció al centro ante la Inspección de Trabajo y Seguridad Social por infracción del convenio colectivo en materia de calendario y cuadrantes, y también ante el Servicio de Inspección de Servicios Sociales del Gobierno de Cantabria sobre la ratio de personal de atención directa en horario nocturno, lo que desembocó en la apertura de un expediente sancionador.

El TSJC considera que los hechos probados «no justifican una sanción tan grave como el despido», más si se aplica la teoría gradualista de las faltasdisciplinarias. Además, la sala aprecia una «clara actividad sindical» del actor y próxima a la finalización del mandato del comité de empresa, en diciembre de 2019, mes en el que fue despedido.

Segundo despido

El sindicato Trabajadores Unidos señala en un comunicado que a esta sentencia hay que sumar un segundo despido, de otra trabajadora, reconocido como improcedente y también con la correspondiente indemnización.

«Con estas decisiones judiciales esperamos que se cierre un capítulo oscuro en este centro y en la comarca de uno de los casos más sangrantes de vulneración de derechos«, espera TU que, a propósito de las elecciones sindicales, confía en entrar a formar parte del comité, »normalizar« las relaciones con la empresa y que »atropellos a la dignidad y a la integridad de los trabajadores como los vividos no se vuelvan a producir«.

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