Un canto a la felicidad

Es la búsqueda del yo, un viaje lleno de emoción y un canto a la felicidad. 'Priscilla, reina del desierto' llega el 16 de marzo a Santander con un protagonista cántabro, el actor Jaime Zataraín. Es la primera vez que se sube a un escenario en Cantabria, algo que le emociona. En el musical todo comienza con una llamada de teléfono: es la exmujer de Tick. Tiene un hijo de seis años y ya va siendo hora de que vaya a conocerlo. Se arma de valor y emprende el viaje con sus dos mejores amigos, Bernardette y Felicia, tres drag que atraviesan el desierto australiano a bordo de un autobús mientras suena una brillante antología de los éxitos de la música disco de los años noventa, desde Madonna hasta Tina Turner, Supertram, Cindy Lauper o Gloria Gaynor y Village People.

"Son las bandas sonoras de las canciones más bailadas de la historia, que hemos bailado incluso sobrios", apuntó ayer el productor José María Cámara, quien presentó el musical acompañado por el consejero de Cultura, Ramón Ruiz y un emocionado y nervioso Jaime Zataraín.

Priscilla llegará a Santander del 16 al 19 de marzo -siete funciones- después de pisar escenarios de Broadway, Londres, Brasil, Argentina, Canadá, Corea del Sur o Grecia, entre otros lugares. Y lo hace con la misma puesta en escena con la que se estrenó en Londres (Jason Donovan interpretó entonces a Tick): 40 artistas, 23 cambios de escenografía, 500 trajes que han recibido premio Tony y Oscar al Mejor Vestuario, 200 pelucas, tocados y sombreros, un autobús robotizado.

Más de 400.000 espectadores ya han visto este musical que tiene los premios Broadway World y Premio del Teatro Musical 2015 al Mejor Musical en Madrid. Tony Escuredo también ha recibido el premio como Mejor Actor Protagonista y en Barcelona ha sido reconocido como el musical de mayor recaudación.

El actor Jaime Zataraín afronta su primera actuación en Santander con mucha ilusión: "Agradezco a la productora SOM que me brinde la oportunidad de cumplir un sueño, actuar en Santander", indicó ayer a la vez que explicó que su personaje es el que desencadena toda la historia. "Cada personaje busca su propio yo en este viaje", argumentó quien se enfrenta a un complejo papel en el que "no puedo gastar bromas como mis dos compañeros, son ellos quienes llevan el peso de la trama del humor. Es difícil moverse entre ellos dos". Animó al público a participar en el musical que acerca a Santander "dos horas y media maravillosas de felicidad. Es un regalo para el público".