Alberto Santamaría, Premio de las Letras Ciudad de Santander 2025 por una obra «coherente, arriesgada e innovadora»

El jurado –formado por Jesús Herrán, Valentina Granados, Ana González y Guillermo Balbona, con Regino Mateo como secretario— decidió por unanimidad otorgarle el premio «por la amplitud, coherencia y riesgo de una obra que se ha consolidado como una de las más innovadoras de su generación». En el acta se destaca su «compromiso con la renovación del lenguaje poético y su capacidad para tender puentes entre la literatura, el pensamiento estético y la sociedad contemporánea» así como «la solidez intelectual y originalidad» de una producción que ha marcado «una transformación generacional en la poesía española actual».

El reconocimiento llega en un momento especialmente significativo para el autor, que acaba de publicar su nuevo poemario, 'De las cosas pálidas' (La Bella Varsovia / Anagrama), un libro que considera síntesis de su trayectoria. «Me ha hecho muchísima ilusión –confesó hoy Santamaría desde Salamanca, donde es profesor de Teoría del Arte en la Universidad–, sobre todo porque no me lo esperaba. Mi literatura no es la más tradicional ni la más conocida, y que el jurado haya querido valorar una propuesta más heterodoxa, que se sale un poco del canon, es una alegría doble».

Recuerda también que apenas hace un mes que presentó en la librería Gil ese nuevo poemario que según señala «de alguna forma mezcla todas las obsesiones que atraviesan mi trabajo. Así que estoy encantado, de verdad, y muy agradecido a mi tierra, porque aunque no viva en Cantabria, siempre ha sido una referencia muy importante para mí».

Autor de otros poemarios como 'El hombre que salió de la tarta', 'Pequeños círculos', 'Yo, chatarra etcétera' o 'Lo superfluo y otros poemas', ha construido una voz inconfundible dentro de la poesía española contemporánea. En ella conviven las ruinas del ideal romántico, la cultura pop, la publicidad y la memoria de lo colectivo. Su poesía, premiada desde los inicios, no se limita a la introspección: es una lectura política del presente, una mirada que interroga la realidad con ironía y lucidez.

Pero si la poesía le ha dado voz, el ensayo le ha proporcionado un laboratorio de pensamiento. Libros como 'El idilio americano'. 'Ensayos sobre la estética de lo sublime', 'Arte (es) propaganda' o 'Políticas de lo sensible. Líneas románticas y crítica cultural' lo han consolidado como uno de los analistas más agudos de la cultura contemporánea. Con una prosa clara y afilada y es que en esos textos, Santamaría examina los vínculos entre estética, poder y deseo, desmontando los mecanismos que hacen del arte un producto y de la emoción un valor de mercado.

Ese diálogo constante entre poesía y crítica define su posición en el panorama literario: la de un autor que piensa la belleza desde la sospecha, que desconfía de los discursos cómodos y que reivindica el pensamiento como forma de disidencia. «La poesía y el arte –ha reconocido en más de una ocasión– son espacios donde todavía es posible resistirse al ruido»

El jurado del Premio de las Letras ha querido reconocer precisamente esa coherencia: la unión entre la creación poética y la reflexión crítica, entre la emoción y el pensamiento. Su obra, apuntan, representa una de las aportaciones más significativas a la literatura española actual desde el ámbito cántabro. Y es también una celebración de la palabra como forma de resistencia ante el conformismo y la saturación cultural.

El escritor no ocultaba hoy su satisfacción de que el premio recaiga en una trayectoria esencialmente poética. «La poesía suele ser la gran olvidada, y que un premio de este nivel la sitúe en el centro me parece importantísimo, sobre todo en un lugar como Cantabria, con una tradición poética tan sólida», afirmó.

Su trabajo, en efecto, se mueve entre lo íntimo y lo político, entre la teoría y la emoción, con una mirada que busca siempre desvelar lo que se esconde tras las superficies. En sus clases, sus libros y sus conferencias late la misma idea: que el arte y la literatura no son decorativos, sino herramientas de pensamiento y de cambio.

Aunque vive desde hace años en Salamanca, el nuevo Premio de las Letras Ciudad de Santander mantiene un vínculo constante con su tierra natal. Torrelavega y Santander aparecen en su escritura más como raíz simbólica que como escenario. Su primera novela, 'Barrio Venecia', publicada recientemente, es un regreso a la infancia en el barrio de Candina: una memoria personal y colectiva donde se mezclan la ternura, la ironía y la reflexión sobre el paso del tiempo.

En su recorrido literario hay también un gesto de gratitud hacia quienes le precedieron. Ha editado y reivindicado voces poéticas como las de José Ciria y Escalante o Luis Felipe Vivanco, nombres esenciales de la lírica cántabra que, como él, pensaron la poesía desde la honestidad y la crítica.

La alcaldesa de Santander, Gema Igual, quiso felicitar al galardonado destacando «la brillante trayectoria y la proyección nacional e internacional de un autor que ha sabido unir creación y pensamiento con una mirada contemporánea y comprometida con la cultura».

El Premio de las Letras Ciudad de Santander, creado en 2015, reconoce cada año la trayectoria de un autor vinculado a Cantabria que haya destacado por la calidad y originalidad de su obra. En la edición anterior recayó en el poeta Ángel Sopeña.

En el caso de Santamaría, el galardón parece cerrar un círculo: el de un escritor que ha sabido transformar la reflexión filosófica en un acto poético, y la poesía en una forma de pensar el mundo. «Pensar –ha dicho alguna vez– es también una manera de escribir poesía».