Cómo serán las visitas a los museos cántabros
Cambios ·
Los centros de la región redefinirán su oferta y acondicionarán sus espacios a la espera de los protocolos que se establezcan desde la Administración centralEl comienzo de las fases marcadas para el fin del confinamiento y la reactivación de las actividades económicas, sociales y culturales generan tanta ilusión como dudas e incertidumbre. En el plano cultural, ese tímido y paulatino retorno en busca de las rutinas y pautas de funcionamiento habituales sigue siendo una incógnita en muchos ámbitos, que ya trabajan para esclarecer las pautas que marcaran su vuelta al trabajo. Uno de los planos fundamentales del panorama cultural es el museístico, cuyos centros se vieron clausurados desde el comienzo de la crisis. Dos meses después, y aunque todavía se desconocen tanto la fecha real en que los museos podrán reabrir sus puertas como las pautas y protocolos que guiarán su actividad a partir de ese momento, muchos de ellos ya trabajan para diseñar y configurar su oferta al público en un contexto enormemente condicionado por las exigencias sanitarias. En el caso de Cantabria, el Museo de Prehistoria y Arqueología (Mupac), dirigido por el doctor en Historia (Prehistoria y Arqueología) por la UC y miembro del Instituto Internacional de Investigaciones Prehistóricas de Cantabria, es uno de los centros que ya trabaja para reajustar su actividad e instalaciones al momento en que pueda reabrir sus puertas.
Una de las medidas fundamentales que van a tomar todos los museos es la de limitar su aforo, que en el caso del Mupac pasará de acoger a 100 personas, menos un tercio del habitual. En la misma línea, las visitas guiadas que realizaba antes de la crisis se reducirán de 20 a a un máximo seis, todo con el objetivo de minimizar al máximo el riesgo de contagio. También se verán afectadas muchas de las actividades que realizan los museos, como talleres o conferencias, se verán afectadas por esa limitación de aforo, que en el caso del Museo de Prehistoria supondrá su cancelación hasta que las complejas circunstancias sociosanitarias se relajen. En todos los casos, la oferta de los centros también contemplará el uso de mascarillas, geles hidroalcohólicos y guantes.
Ese, el del uso de guantes, por su parte, es uno de los aspectos que condicionará la oferta de elementos interactivos que cada vez más presentan estos centros. En lo que a estos sistemas se refiere, dado que requieren de manipulación por parte de los usuarios, serán por norma general desactivados porque el uso de guantes impide un uso correcto de los mismos. En el caso del Mupac y atendiendo a estos criterios, otro de los elementos que dejarán de poder disfrutar sus visitante será la visita virtual a la cueva de La Garma, que implica el uso de gafas de realidad virtual y de un mando, constituyendo por ello otro posible foco de propagación y contagio.
Aunque la fecha en que los museos podrán reabrir todavía no está definida -atendiendo a las pautas marcadas por el Gobierno central podrían hacerlo ya este lunes o a partir del 25 de mayo, en caso de que esta fecha marcase el comienzo de la segunda fase-, muchos centros dedican estos días a marcar los recorridos e itinerarios que podrán realizar sus visitantes, un aspecto fundamental para el que se apoyarán tanto en el los sistemas de vídeo vigilancia como en el trabajo de los guías y vigilantes de seguridad, que velarán para evitar aglomeraciones y el respeto de la distancia de seguridad. Aunque dichas circunstancias no son frecuentes en los museos de Cantabria, el hecho de que se baraje la posibilidad de ofrecer acceso gratuito cuando reabran sus puertas será un factor que deberán tenerse en cuenta. Precisamente por ello, y con el objetivo de evitar esas acumulaciones de público tanto en las propias instalaciones como en el exterior, otro de los aspectos que se barajan es el uso de la cita previa entre quienes deseen visitar sus muestras e instalaciones.
Esta pormenorizada regulación también afectará, en el caso de los centros que lo oferten, a los investigadores que deseen acudir a los centros a desarrollar sus trabajos. En el caso del Mupac, solo se permitirá el acceso de dos investigadores cuando asistan de forma conjunta y de uno cuando lo hagan por separado. Para ello, todo el equipamiento de su sala de investigación será equipada con todas las medidas de seguridad necesaria.
Gobierno central
Aunque el horizonte de reapertura apunta en la mayoría de los casos al próximo día 25, los museos cántabros dependen de las pautas que les marquen desde la Consejería de Cultura y ésta, a su vez, de los dictámenes que establezca el Ejecutivo central. Por el momento, los centros cántabros están remitiendo a la Dirección General de Cultura los protocolos que creen necesario establecer para garantizar la seguridad tanto de sus visitantes como de sus propios trabajadores. Dichas pautas, a su vez, son compartidas con el organismo encargado de la prevención de riesgos de la Función pública, de quien depende el visto bueno y las fechas de reapertura. Unas fechas que en todos los casos son por el momento provisionales, y que dependerán de cómo vayan a avanzar en Cantabria las distintas fases de la 'desescalada'.