La Copa Apebol repite finalistas

En su intento por voltear la mala racha que atraviesa, Borbolla le dio la capitanía a Chin Velasco, la apertura a Óscar y el cierre a Alberto Díaz. La táctica no salió mal en el primer parcial, jugado desde los dieciséis metros, y en el que Alfonso González colocó un emboque de esos que hacen dudar a los bolistas si tirarse a él o jugar a bolos. Los nojeños apostaron por jugar y tras subir diecisiete solo estropearon la jugada con los tres últimos lanzamientos, con los que solo bajaron cuatro palos. Pese a ello llegó el cierre y la primera anotación en su casillero, toda vez que una bola queda del capitán de Comillas lastró su jugada.

Tras quince días confinados los jugadores de Comillas habían vuelto a la competición el pasado domingo precisamente en Noja en un partido en el que cayeron por 4-0. Tras anotarse el estreno del choque, Borbolla quiso seguir con su parcial triunfador en el segundo chico, esta vez con la colaboración de un cuadro rival que, todavía, está en proceso de recuperación. Los comillanos, de nuevo desde dieciséis metros, se quedaron en 35, una baja tirada que no desaprovechó el cuadro que ayer actuaba como local para cerrar, hacer 50 después de birlar 32 y poner tierra de por medio.

Borbolla volvía a ser el Borbolla de inicio de curso, especialmente de birle. En el tercero de nuevo hacían jugada grande tras una bajada de 33, aunque esta vez el chico se fue para Comillas después de que Alfonso embocara con la última bola. El de Ontoria había subido el cachi a la raya máxima y acertó con él en un momento decisivo.

Alfonso fue de nuevo el protagonista del cuarto chico, el que sirvió para poner el empate en el marcador. Primero para tirar cinco desde el tablón de fondo cuando su peña necesita cuatro para cerrar y luego, tras igualar Borbolla, para derribar otros cuatro con la última en la segunda tirada. Noja tuvo el chico cerca en la primera mano, pero a Roberto de Juana se le fue el penúltimo birle al último de la fila del medio y Alberto Díaz solo pudo firmar tablas con una bola que llevó la fila de la mano.

La exhibición del jugador más veterano de la Liga (con permiso de Agustín Fernández que tiene ficha con San Jorge) no se quedó ahí y en el quinto volvió a embocar con la última de tiro. Esta vez el acierto no le sirvió para que su peña se anotase el parcial, y es que Óscar había embocado con la primera bola, sus compañeros respaldaron la tirada y la obligación era de 50.

Un mal birle condenaba a Comillas, una situación que se repitió en el sexto. Tras subir diecisiete las dos primeras bolas bajaron con once palos, pero a partir de ahí la jugada se enfrió y, pese a llegar a los 40 necesarios para el cierre, la pelota del partido quedaba en el tejado de Noja. Desde los dieciocho metros a los que se habían ido los comillanos, despertó los fantasmas de partidos anteriores, marró de tiro y envió el partido al desempate.

El todo o nada del cierre se disputó de nuevo desde dieciséis metros y con la misma raya y emboque de los dos chicos anteriores en los que Comillas puso raya. Óscar ejerció de líder y abrió con un emboque que además llevó cuatro bolos y templó los nervios de sus compañeros que ayudaron a rematar una jugada de 60 en la que, de birle, El Junco aportó otros doce palos. Pese a un emboque de José Díaz, los comillanos no llegaron.