Los Remedios, un modesto subcampeón

El éxito del pasado curso, sin embargo, no ha cambiado la filosofía de los de Muslera, que mantienen los pies en el suelo y se han marcado como objetivo prolongar su estancia en la División de Honor. «El objetivo, aunque hayamos quedado segundos el año pasado, es el mismo de cada temporada, dejar el número suficiente de peñas por debajo para mantener la categoría, en este caso cuatro», afirma rotundo Edu Herrera, jugador de los de Guarnizo. Una mira modesta que no contrasta con la ilusión generada por los resultados obtenidos en la última campaña. «A partir de ahí podemos marcarnos otras metas y, sobre todo, la de disfrutar de lo que nos gusta».

Pocos integrantes de Los Remedios podían imaginar una situación así no ya en el mes de marzo, cuando todas las peñas se encontraron con la pandemia, sino unos meses antes, cuando el patrocinador principal decidió no continuar con su apoyo a la entidad y, de repente, la directiva que encabeza José Manuel Díaz se vio sola ante el peligro y sin un respaldo económico sólido. Pese a ello, Lel puso a los suyos a trabajar para sacar el año adelante, algo que consiguieron con brillantez y que, pese a alguna duda por el camino, les ha animado a continuar un tiempo más.

La primera toma de contacto de la plantilla tuvo lugar en Orejo con la baja de Isaac Navarro, aquejado de problemas de espalda, y con sensaciones positivas debido a que la pasada campaña finalizó ya entrado el otoño. «Aunque sigue costando, es más por el frío que por el parón. El primer día es para soltar el brazo, los músculos y para ir haciéndonos a las temperaturas propias de este mes», asegura Edu. En la sesión preparatoria estuvo la única incorporación a la partida, Luis Vallines, que llega desde Sobarzo después de dos temporadas en las que se ha asentado en la máxima categoría. El laredano toma el relevo de Óscar Cianca, capitán durante las últimas temporadas, que hace el camino inverso a Vallines y viaja de Muslera a La Tapia. Su relevo a la hora de llevar el emboque lo tomará Federico Díaz.

Además de los esfuerzos económicos derivados de la falta de patrocinador principal y de la pandemia, que hace que las pequeñas aportaciones y los ingresos por aficionados se reduzcan considerablemente, Los Remedios se enfrenta en 2021 a una Liga con cuatro descensos (o tres más una promoción, a la espera de lo que decida la asamblea), que será larga y obligará a no bajar la guardia a las peñas en ningún momento. Para Herrera, sin embargo, la competición de 30 jornadas es la más justa. «Todos creemos que es larga, pero va a ser un año, porque al siguiente recuperamos la Liga de catorce. Creo que es lo más justo». El jugador torrelaveguense es escéptico acerca de si el torneo podrá comenzar en la fecha prevista, el 20 de marzo. «Ojalá. Al final lo primero, está claro, es la salud».

Una salud, al menos la deportiva, de la que gozan por Muslera antes de una temporada en la que, pese a su éxito precedente, apuestan por la modestia. Y es que ya fueron segundos en 2018 y, un año después, les tocó sufrir después de una mala primera vuelta. Ese será otro de los objetivos, empezar bien. Si lo consiguen, como siempre señala Lel, el techo es más alto.