Un retraso electoral poco oportuno

Era una de las peticiones de algunos votantes, no solo variar el lugar de las urnas sino habilitar más puntos de votación, algo que para uno de los candidatos a la presidencia, Paulino Pinta, es algo inviable. «Tendríamos que convocar otra vez el censo y repartirlo y eso conlleva un plazo de tiempo demasiado amplio, sería volver a empezar todos los procedimientos». Para el otro candidato, Norberto Ortiz, dividir la votación por diferentes zonas de Cantabria sería una de las soluciones para celebrar los comicios, aunque la división del censo daría lugar a una ardua tarea.

Lo que sí tiene claro Ortiz es que el aplazamiento de la elección de la asamblea trastoca los planes de cara al próximo curso. «Es una faena, porque en la Federación hay muchísimo que hacer, mucho que planificar. Me parece malo para los bolos, gane quien gane». Una decisión inevitable que para el aspirante es un palo en la rueda debido a que, en la situación actual, las reglas del juego sanitario pueden cambiar cada poco tiempo. «A mí no me gusta tomar medidas según vayan acaeciendo las cosas, lo que hay que tener claro son los muchos escenarios con los que se puede encontrar el mundo de los bolos por la situación del covid, hay que analizarlos y dar respuesta antes de que llegue el problema», apunta.

Partidario de las medidas que tiene previsto tomar la federación para acelerar el proceso, Ortiz razona los motivos por los que las urnas pueden abrirse en días próximos. «En las mesas habrá cinco personas como máximo y el votante seis, los grupos establecidos se mantienen en el límite. Con planificación es posible».

Para Pinta el retraso electoral no va a ser tan decisivo. El taniego es optimista con la posible fecha de votación y cree que el equipo ganador tendrá margen para tomar las decisiones que marcarán el año 2021. «Yo espero que dentro de quince días tendremos las votaciones, las convocarán para cuando se levante el plazo del confinamiento perimetral, si no habría que hacer los salvoconductos para que la gente pueda votar, aunque hacérselo llegar será un problema. Hay que trabajar para que sea lo antes posible porque no sabemos cuándo nos va a levantar las restricciones el Gobierno».

El duelo entre el proyecto continuista de Paulino Pinta y el equipo que encabeza Norberto Ortiz es el más igualado de los últimos años en el mundo bolístico, lo que garantizaba además una alta participación de todos los estamentos, algo para lo que el retraso y la situación sanitaria pueden suponer un frenazo. «Yo voy a seguir trabajando para que la gente no se desconecte», aclara Ortiz, «pero está claro que cuando hay un proceso electoral, hay unos plazos y los implicados cuentan con ello. Para que nadie desenganche tienen que ver que estamos funcionando». En el mismo sentido, su rival también cree que la participación puede verse resentida. «Es posible que baje, me gustaría pensar que no, pero la gente coge más miedo».

Una situación que, además de prolongar el año bolístico unas semanas más, alarga una campaña electoral que ya de por sí ha dado para mucho. «Se hace larga la temporada, ya va siendo hora de terminar, aunque e2020 se va a solapar con 2021, a ver cómo lo hacemos», asegura Pinta. Ortiz, por su parte, asegura que, pese a las ganas de que llegue el día decisivo, «es algo que es menor en relación a la situación que se está viviendo. Tenemos mucha ilusión y muchas ganas de que los bolos tiren para arriba, la ilusión de la gente es la gasolina que me mueve».

De momento ya han comenzado las conversaciones entre Federación, Junta Electoral y Sanidad para que las elecciones puedan celebrarse lo antes posible. Previstas en el Aula Madera de Ser de La Albericia, una de las opciones que se valora es trasladarlas al corro de El Parque de Maliaño. un recinto más amplio, con facilidad para organizar las entradas y las salidas y con un amplio aparcamiento cercano.

La candidatura que encabeza Norberto Ortiz también presentó ayer un escrito en el que solicita la colaboración de Salud Pública para desarrollar un protocolo sanitario que garantice la seguridad y participación de los electores en el proceso debido a la necesidad de que los ganadores tomen decisiones para ayudar a paliar las dificultades que pueden tener en 2021 las peñas que no han competido en 2020.

Un vez que se celebren los comicios, y si los plazos corren en la misma proporción, los bolos tendrían presidente un mes después de las elecciones, es decir, como pronto a finales de diciembre, pocos días antes de la fecha prevista para el inicio de los entrenamientos de muchas peñas de División de Honor.