El Racing se juega la vida en tres partidos

El Racing empieza a ver el final de su horizonte más cercano. La conclusión del campeonato regular. Los tres últimos obstáculos antes de afrontar el decisivo play off de ascenso a Segunda División. El cuándo ya se sabe. A partir del 16 de mayo, cuando se sorteen las primeras eliminatorias. En ese momento se decidirá también el dónde. Pero de estos tres últimos partidos saldrán el cómo y el cuándo. Porque, aunque Pedro Munitis le reste importancia semana sí y semana también, no es lo mismo afrontarlo como primero que en cualquiera del resto de posiciones de play off. El problema es que el Racing no depende de sí mismo. Hacer los deberes y esperar. La vida deportiva de la entidad verdiblanca se juega en apenas dos meses.

A falta de nueve puntos por disputarse, el equipo cántabro sigue a cuatro puntos del líder, el Racing de Ferrol. Eso sí, con un duelo directo a la vista en un par de jornadas. En la 37. Una oportunidad para arrancarle tres puntos a los gallegos. Sin embargo, la victoria no tendrá valor en la lucha por el título si no viene acompañada por otro tropiezo del conjunto ferrolano en uno de sus otros dos compromisos, a domicilio, frente a un Coruxo casi salvado y un Astorga que, de momento, se sigue jugando la vida.

Antes de viajar a A Malata con el cuchillo entre los dientes, el Racing recibirá el domingo, a las 17.00 horas, a la Sociedad Deportiva Compostela. Otro clásico del fútbol español, con más apuros aún que el equipo cántabro. De hecho, el cuadro santiagués se encuentra prácticamente descendido tras la derrota con el Coruxo (1-2). La victoria frente al líder en la jornada anterior permitió soñar a los de San Lázaro, que en Santander pueden certificar su descenso matemático a Tercera División. Se encuentran a seis puntos de la promoción, que en estos momentos ocupa el Sporting B y a nueve de los puestos de salvación que cierra el Celta B.

El Racing tiene que ganar como sea al Racing de Ferrol, pero lo que haga el líder frente al Coruxo esta semana en O Vao puede ser clave. Especialmente con respecto a la presión con la que afronten los de Miguel Ángel Tena la visita de su más próximo perseguidor. Hace semanas que al otrora imbatible conjunto de A Malata le tiemblan las piernas y el depósito les marca ya la luz de reserva. Por eso, cuanta más presión, mejor. Además, en esa jornada 37 habrá otro enfrentamiento directo entre los otros dos equipos con billete para el play off: Tudelano y Unión Deportiva Logroñés.

Broche de infarto

Y llegará una última jornada que puede ser a vida o muerte o un mero trámite si el Racing no cumple con su misión de ganar los encuentros que le quedan. En esa fecha 38 del campeonato el equipo de Pedro Munitis recibe a un Coruxo que, salvo derrumbe inesperado, llegará salvado a los Campos de Sport, mientras que el Racing de Ferrol visitará en el modesto y pequeño campo del Astorga a un rival que se puede estar jugando su futuro deportivo. Se prevé una jornada de nervios. Muchos nervios.

Claro, lógicamente, si el Racing gana los tres encuentros que le restan por disputar, no tendrá ni que preocuparse por los equipos que vienen por detrás. Una vez logrado el billete para el play off, lo importante es quedar primero. La diferencia entre los beneficios del segundo y el cuarto clasificados es mínima. De todas formas el Racing no debería perder de vista a un intratable Tudelano, que está empatado a puntos con los cántabros, y una Unión Deportiva Logroñés que hace la goma pero no se despega de sus enemigos.

Si el campeonato terminase de la forma en que se encuentra a día de hoy, el Racing, como segundo clasificado, se enfrentaría a un cuarto de otro grupo. Por lo tanto, entraría en el bombo de la primera eliminatoria junto a Socuéllamos, Hércules y Cádiz. El resto es una incógnita que solo la suerte y los resultados decidirán. El caso es que la segunda plaza obligaría a pasar tres eliminatorias de cara a lograr el ascenso. Una auténtica lotería, además de una machada de grandes dimensiones.

Ascender es primordial, por historia y por la viabilidad económica del club. Sin embargo, el Racing no se juega la vida solo sobre el césped. Como casi siempre. La entidad cántabra tiene por delante unas semanas de incertidumbre y alto voltaje. Sin apenas ingresos por los múltiples embargos, los futbolistas marchan camino de la tercera nómina sin cobrar y la plantilla no deportiva unas cuantas más. El convenio de patrocinio con el Gobierno de Cantabria es imprescindible. El próximo jueves vuelve a estar marcado en el calendario. ¿Aprobará el Ejecutivo el envío de la propuesta al Parlamento para el debate con el resto departidos? Una incógnita después de más de dos meses sin apenas avances en este asunto.

El Racing necesita el convenio para solventar la deuda con la Agencia Tributaria, por higiene económica y porque, en caso de ascenso sobre el césped, la Liga de Fútbol Profesional solo aceptará de vuelta al equipo cántabro si aporta el papel firmado por Hacienda justificando el acuerdo de pago entre ambas partes. Se avecinan dos meses de auténtica locura.