Álvaro Bustos, con gripe, no participa en la sesión de entrenamiento

Bustos se perdió una jornada en la que Guillermo Fernández Romo se llevó a sus futbolistas a entrenar sobre la hierba artificial del campo número 3, debido al delicado estado, tanto del Santi Gutiérrez Calle como del número 2 –los de césped natural– debido a las intensas lluvias de las últimas semanas.

De la evolución del extremo verdiblanco y de que remitan los síntomas de la gripe dependerá que pueda participar el próximo sábado –19.00 horas– en el importante partido que el Racing tiene en los Campos de Sport frente a un rival directo en la lucha por el título y los puestos de play off de ascenso a Segunda División: el Rayo Majadahonda.

El asturiano ya fue suplente el pasado domingo en Valladolid y, después de que Marco Camus fuese el verdiblanco más destacado –dentro del desastre general– en el José Zorrilla, tenía opciones de ver el choque ante el cuadro madrileño de nuevo desde el banquillo. La enfermedad de Bustos le da más posibilidades a una hipotética titularidad del cántabro el próximo sábado.

Precisamente fue Camus quien salió este martes a atender a los medios tras la sesión de trabajo en La Albericia. El canterano afirmó que ante el Valladolid Promesas «no salió nada de lo que esperábamos» y apeló a «hacer autocrítica. Todo el mundo sabe lo que hizo mal el otro día y ninguno puede estar contento».

Después de mucho llamar a la puerta, ante el cuadro blanquivioleta, fue titular: «Me ha costado bastante tener más minutos». Sin embargo, afirma haberlo llevado con naturalidad. «En mi posición hay buenos jugadores. Si ellos jugaban es que se lo merecían. Tenemos que dar pasos hacia adelante y ponérselo cada vez más difícil al entrenador. Aprovechar las oportunidades».

«Estaba como loco porque llegara este momento. Desde que alcancé el primer equipo, creo que nunca he estado tan bien como ahora. Ha llegado mi hora. Me encuentro bien. Cada partido, mejor», concluyó.