Arturo Molina se reivindica como futbolista polivalente
Arturo Molina se reivindicó este jueves como comodín para el centro del campo. Más allá del tópico de que está a disposición del entrenador ... para jugar donde le indique, explicó que es capaz de adaptarse de forma natural a diferentes puestos. «Los partidos varían mucho según el rival y sus características, pero yo me acoplo a cualquier posición de la zona de tres cuartos», explicaba este jueves en la sala de prensa de las Instalaciones Nando Yosu después de que haya entrenado desde su llegada a Santander en varias posiciones.
Pese a que considera que el parón puede romper el ritmo del equipo, reconoce que en parte le ha sido útil para acoplarse al grupo y sus nuevos compañeros. «Llegas con muchas ganas y quieres entrar en dinámica de partido, pero el parón me ha servido para acoplarme con los compañeros, conocer más sus características y que ellos conozcan las mías. Ha venido bien a medias», explicaba uno de los dos fichajes de la ventana invernal.
Molina ve «bien» al equipo, trabajando «bien y con intensidad, con las ideas claras». Admite no que no conocía demasiado al Racing hasta su llegada, pero ya ha tenido tiempo de aterrizar. «Tenemos una plantilla bastante amplia y competente, y sí es verdad tenemos dos bajas, pero afrontamos los partidos que vienen con ilusión y ganas», añadía.
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«Esta semana he visto realmente cómo se trabaja y lógicamente será la Liga la que nos dictará cuál va a ser nuestra posición, pero tenemos que ir de fin de semana en fin de semana. Creo que si miramos más allá nos equivocaremos».
Porque el murciano se apunta a la máxima, un clásico del fútbol, del próximo encuentro. «La plantilla no está pensando más allá del domingo –respondió a preguntas sobre el cada vez más cercano partido frente al Deportivo–, y si no lo hiciéramos nos equivocaríamos, porque ahora mismo lo más importante es el Badajoz.Con esa mentalidad veo al equipo». Molina opta a ser titular en los próximos compromisos, máxime dada la concatenación de encuentros que se avecina y la confianza que el entrenador, con quien ya había trabajado, ha depositado en él.
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