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Garbiñe Muguruza celebra su victoria. AFP
Muguruza se mide a Stosur con el recuerdo de su título en París
Roland Garros

Muguruza saca el mazo a pasear

La hispano-venezolana realiza un partido casi perfecto y derrota a la finalista del torneo en 2010 para meterse en octavos de final por quinta vez en su carrera

Manuel Sánchez Gómez

Sábado, 2 de junio 2018, 08:03

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Si Garbiñe Muguruza es una jugadora de supersticiones, su paso en este Roland Garros 2018 no puede ir mejor encaminado. Si en 2016 ya ganó a Svetlana Kuznetsova antes de levantar el título, este sábado, en la pista central del torneo, se enfrentó, y con mucha superioridad, a la que aquel año fue su rival y víctima en semifinales, la australiana Samantha Stosur. Muguruza se deshizo de la oceánica por un contundente 6-0 y 6-2 y confirmó su presencia en los octavos de final de Roland Garros, ronda en la que perdió el año pasado.

Para cumplir con este expediente del curso, la hispano-venezolana inauguró la pista central del torneo este sábado en un día en el que se alternaron nubes y sol y en el que quien más brilló fue Muguruza, que impuso una cátedra a la que fuera campeona del Abierto de Estados Unidos en 2011.

En los primeros compases Muguruza testó el nivel de Stosur. Descubrió y aprovechó su debilidad en el revés, sobre todo cuando no podía golpear parada, y la hispano-venezolana quebró el primer saque de la australiana. No estuvo nada cómoda Stosur, que no encontró grietas en el juego de Muguruza, y no tardó en volver a pagarlo. Una doble falta y una derecha al pasillo de dobles confirmaron la segunda rotura de la campeona en 2016 y el 3-0 en el marcador.

Pese a que Stosur alcanzó la final en Roland Garros en 2010, la arcilla no es ni de lejos su superficie favorita y sufre mucho cuando tiene enfrente a una jugadora capaz de pasarle bolas y adaptarse con facilidad al polvo de ladrillo. El conteo de jugos continuó y Stosur, ya con 34 años, se encontró en una situación parecida a 2016, cuando chocó con Muguruza en semifinales y se llevó un 6-2 y 6-4, en lo que supuso la antesala al primer Grand Slam de la pupila de Sam Sumyk. Muguruza incluso superó aquel inicio, cuando arrancó 4-0, y en menos de 20 minutos ya tuvo un 5-0 en su marcador y la confianza por las nubes.

Con su 'look' característico de visera y gafas de sol, Stosur sólo hizo daño cuando se le quedaron bolas muertas a mitad de cancha. Ni las subidas a la red (2/5), ni el servicio (9 de 26 puntos ganados con primer servicio), ni los golpes ganadores (conectó seis) fueron argumento suficiente para combatir a una Muguruza que en 25 minutos se llevó el primer set por 6-0. Un 6-0 que hizo que mucha de la gente que llegó tarde a la Philippe-Chatrier se perdiera la exhibición de la hispano-venezolana, que luce una serenidad y una calma que invitan al optimismo a la hora de pensar en el tercer Grand Slam y la segunda corona en París.

La superioridad de Muguruza pareció un libro cerrado para Stosur, y es que la australiana apenas varió su plan, pese a verse avasallada desde cada recoveco de la pista. Dispuso de su primer punto de juego en el inicio del segundo set, pero se quedó con la miel en los labios y comenzó ya con desventaja abajo el segundo parcial. Muguruza no titubeó para poner el 2-0 y el momento de alivio para la oceánica llegó cuando sumó su primer juego y su sol particular comenzó a brillar en la central de Roland Garros.

A medida que las nubes se despejaron en el Grand Slam parisino, Stosur se creyó sus opciones en el segundo set y se aprovechó de una doble falta de Muguruza para quebrar el saque en blanco e igualar la contienda.

La respuesta de la hispano-venezolana no tardó en llegar y fue certera y precisa. Mostró autoridad en la red nada más perder el saque y le devolvió el golpe a Stosur con un juego ofensivo preparado para devolver el camino a su sendero. Otra rotura más en el séptimo juego dio prácticamente carpetazo al partido, que llegó a su final cuando conectó su primer servicio directo del encuentro.

Su rival en octavos será la Lesia Tsurenko, que derrotó este sábado por 6-2 y 6-4 a Magdalena Rybarikova. La ucraniana se ha encontrado en dos ocasiones con Muguruza, con una victoria para cada una. En Wuhan 2017 se quedó el triunfo la hispano-venezolana, mientras que en Canadá 2015 el encuentro cayó del lado de la jugadora del este de Europa.

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