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Muerdo: «Escribo lo que necesito escuchar, buscando un prisma positivo»

El artista murciano publica este viernes 'La sangre del mundo', un disco plagado de sonidos distintos con el hilo conductor de su propia personalidad

Viernes, 5 de marzo 2021, 16:10

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Un viaje de principio a fin. Así plantea Pascual Cantero, Muerdo, la concepción de su último disco. 'La sangre del mundo' es un salto sobre el océano Atlántico que une sonidos y culturas. Se publica este viernes tras algunas pistas sobre su riqueza estilística en forma de single. El artista reconoce sus ganas de culminar este proceso con la llegada a la calle de sus nuevas canciones, un reflejo pleno y novedoso, por los elementos electrónico que incluye, de su propia personalidad.

De Murcia a Uruguay, Argetina, Jamaica… ¿Comó ha aterrizado en todos esas destinos?

Con mucho respeto y acercándome de una forma sutil y poco ortodoxa. Meterse en un mundo tan basto como el folclore requiere tiempo, estudio. En nuestro caso, como siempre digo, no hacemos una cumbia, sino un aire de cumbia, no una chacarera, sino aires de chacarera.

¿Quiénes son sus referentes para meterte de lleno en estos géneros ajenos?

Siempre he tenido influencias muy heterogéneas y me ha llamado la atención el folclore, sobre todo los proyectos que lo han fusionado con otras músicas. De la generación del sonido Barcelona bandas como Dusminguet, Ojos de Brujo, Amparanoia, a bandas que han fusionado folclore y rock latrionamericano como Aterciopelados, Fabulosos Cadillacs… Y luego, obviamente, folcloristas más puristas o cantautores como Violeta Parra o Víctor Jara.

Entra en estas sonoridades pero le aporta modernidad con toques de electrónica. ¿Cómo lo ha encajado?

Con mucha ilusión porque me apetecía mucho incorporar esos sonidos. Tengo 32 años y por generación es algo que he bailado y escuchado. Soy bastante fiestero además, pero es algo que nunca había incorporado a mi música y sentía que había una incoherencia. Tenía ganas de incorporar estos sonidos y hacer una mezcla lo más equilibrada posible. Ahí he contado con la maestría Diego Pérez, productor del disco, que me iba asesorando, para que el oyente no perciba un golpe de timón excesivo.

Al escucharse, ¿le gusta el resultado de esta evolución?

La verdad que sí, estoy super satisfecho. Me siento muy representado por el disco. Es algo que con el disco anterior, que es un trabajo precioso, con aires más pop, no me sentía tan representado como ahora y con este componente generacional que tiene.

Ha mencionado a Diego Pérez, pero hay más nombres propios. ¿Cual ha sido el criterio para elegir esas colaboraciones?

Han surgido de manera muy natural. Habíamos publicado canciones en una especie de recopilatorio con duetos. He hecho mucho antes y huía un poco de meter mucho feat. Las canciones en las que hay colaboraciones, es la propia canción la que lo ha demandado. Queriamos esos colores. Algunas son más sutiles, como el Niño de Elche que hace una especie de background de coros y otras con más protagonismo, que incluso han sido coautoras de la canción, como Lido Pimienta. Todas están justificadas y parten de una muy buena relación personal.

Quinto disco, pero primero en pandemia. Además, le ha tenido viviéndolo desde otra parte del mundo, confinado en Argentina

El disco ha sido lo que me ha salvado de la pandemia. El hecho de tener cada día que escribir, desarrollar, producir, ir al estudio, me venía muy bien para no pensar que estaba a miles de kilómetros de casa. Había días de todo tipo pero ha sido una experiencia linda porque pude focalizarme casi en exclusiva en ello. No había podido hacerlo nunca. Éramos el disco, el productor y yo y creo que le ha sentado bien.

¿Todo el trabajo compositivo se ha realizado en esos meses o venía de antes?

Venía iniciado pero creo que llegué a Buenos Aires con tres canciones. Casi todo se ha escrito en pandemia y durante ese proceso Hay dos que no son nuestros. Las coplas de de Martín Fierro y José Martí y la remusicalización de Pablo Milanés.

¿Cree que valoramos menos el folclores propio que los ajenos, que tenemos prejuicios de nuestros sonidos?

Está totalmente denostado. Ahora mismo hay una moda de música latinoamericana mezclada con electrónica con nombres como el de Nicola Cruz. Me llama mucho la atención algunos proyectos que he descubierto que están mezclando folclore ibérico, gallego, de La Rioja, con mújsica electrónica también. Siempre miramos hacia fuera y pensamos que lo nuestro es solo el flamenco cuando eso es totalmente falso. El flamenco es un folclore del sur de España pero hay mucha más música popular que es maravillosa.

Menciona cosas que ha ido escuchando. ¿Le gusta mucho enredar y buscar curiosidades nuevas?

Me gusta pero no consigo sorprenderme. Me gusta escuchar música a diario, pero me doy cuenta de que escucho mucha música antigua, de que en la música actual hay proyectos que me mueven pero la inmensa mayoría me cuestan. Tampoco soy como el típico melómano que se escucha 40 discos a la semana y sabe todas las referencias, fechas y demás. Más bien cuando consigo algo que me gusta lo integro muy rápidamente y pasa a formar parte de mi universo.

Hay un mensaje importante de superación, de mirar en positivo sobre los problemas en todas sus letras. ¿Es algo buscado?

Es mi actitud ante la vida. Escribo lo que necesito escuchar. Como no lo encuentro, lo escribo yo. De todas formas, soy una persona muy positiva. tengo facilidad para encontrarle a todo un prisma positivo.

Hoy por hoy, ¿cuál es la sangre del mundo?

Para mí es la música, la cultura, la expresión de los pueblos. En ese sentido, América Latina es el corazón que bombea toda esa energía. No solo expresión a nivel artístico y cultural, sino todo ese flujo de emprendimiento. Siento que es muy potente, que hay muchas ideas, muchas nuevas fórmulas, muchas ganas de hacer cosas.

Si compara la percepción que se tiene en América Latina con lo que se está haciendo aquí, ¿con cuál se queda?

Me quedo por supuesto con América Latina en lo que viene siendo la escena cultural y la formación general del público para recibir un producto cultural. En españa llevamos muchos años de homogeneidad y hace que nos hayamos acostumbrado. En los 70 y 80 había muchas más propuestas. De hace unos años, primero llegó el mainstream, luego el indie…

En este disco canta a su trayectoria y defiende que los sueños se cumplen. ¿Los suyos se han cumplido?

Pues sí. Por lo menos me he aproximado bastante. Quería vivir de la música y viajar por el mundo. La música me ha dado una identidad y me ha hecho conocer gente increíble. Tengo esa plenitud.

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