La brecha salarial de género alcanza ya el nivel superior

En concreto, la diferencia retributiva entre mujeres y hombres con una licenciatura o doctorado está en 9.495 euros, esto es, prácticamente lo que gana por ejercicio una empleada sin formación. «Existe una fuerte infravaloración de su trabajo», critica el sindicato, unas diferencias de sueldo que según sus responsables «ya no son explicables desde la falta de formación, como se ha mantenido durante décadas».

El empleo femenino, según cifras del INE y el Ministerio de Trabajo, marca ya niveles récord, con más de nueve millones de afiliadas a la Seguridad Social, un millón más que 2007 –el último año de bonanza antes de la crisis– y 100.000 nuevas altas más que las registradas en el colectivo masculino en el mismo período. Sin embargo, ellas siguen ganando como promedio 5.982 euros menos anuales que ellos.

Esa brecha resulta más elevada entre las personas con estudios superiores porque también ese colectivo tiene sueldos mayores. Esa brecha resulta más elevada entre las personas con estudios superiores porque también ese colectivo tiene sueldos mayores. Eso sí, la OCDE también constata la mayor preferencia femenina por carreras profesionales asociadas, a priori, a niveles de salario inferiores. Así, ellos suelen inclinarse más por estudios universitarios relacionados con los campos de ciencias e ingenierías, mientras que «una mayor proporción» de mujeres se matricula en carreras vinculadas a la educación, las humanidades, el arte o los idiomas.

En términos relativos, no obstante, las mujeres sin formación ganan un tercio menos que los hombres. Para quienes solo terminaron el ciclo primario la distancia es de 6.608 euros anuales, que llegan 7.157 euros si se ha concluido la etapa secundaria y hasta 8.105 euros en la formación profesional de grado superior. Y en el caso de las mujeres que ni siquiera han terminado la primaria la brecha de sueldo se sitúa, por término medio, en 5.508 euros.

La OCDE también apunta en su estudio que las mujeres, además, «buscan en mayor medida que los hombres carreras profesionales menos competitivas que ofrecen mayor flexibilidad laboral», esto es, que les permitan compatibilizar mejor las responsabilidades familiares y laborales. Pero para el sindicato, este último argumento «es más acorde a una interpretación que a un hecho constatable».

Lo que en UGT, que reclama la aprobación cuánto antes de una Ley de Igualdad Salarial, sí ven más factible -pese a reconocer que tampoco disponen de datos para conocerlo- es que hay más hombres en puestos directivos, jefaturas y cargos de responsabilidad que mujeres, pese a que ellas tienen mayor presencia entre los titulados universitarios.