Una mujer asume por primera vez las riendas del sindicato francés CGT

«Una buena noticia para todas las mujeres», consideró la primera ministra francesa, Élisabeth Borne, tras la elección de Binet como secretaria general de la CGT. «Una mujer, una feminista a la cabeza de la CGT», se felicitó Clémentine Autain, diputada de La Francia Insumisa, el partido del izquierdista Jean-Luc Mélenchon.

«Sean cuales sean nuestras divergencias, alegrémonos de que el lugar de las mujeres en puestos de responsabilidad progresa en política, en el mundo sindical y en otros lugares», escribió en Twitter la macronista Yaël Braun-Pivet, presidenta de la Asamblea Nacional.

La elección de Binet, muy implicada en temas medioambientales y de igualdad de género, para sustituir a Martínez, secretario general de la CGT desde febrero de 2015, sembró la sorpresa en un tormentoso congreso en el que afloraron las divisiones internas.

Marie Buisson, candidata propuesta por Philippe Martinez, y su rival, Céline Verzeletti, partían como favoritas, pero ninguna de las dos logró imponerse en el congreso de la CGT, el segundo sindicato francés en número de afiliados tras la CFDT de Laurent Berger. Al final, triunfó Binet, que encarnaba la tercera vía.

Binet fue miembro de la Unión Nacional de Estudiantes de Francia (UNEF), un sindicato de tendencia izquierdista, cuando estudiaba Filosofía en la Universidad de Nantes. Desde marzo de 2018 era secretaria general de la Unión General de Ingenieros, Directivos y Técnicos (UGICT-CGT).

La nueva secretaria general de la CGT se forjó en la lucha contra el contrato de primer empleo (CPE), que defendía el entonces primer ministro Dominique de Villepin. El CPE preveía un período de prueba de dos años durante el cual el empleador habría podido despedir al joven empleado sin justificación. El entonces presidente francés, Jacques Chirac, acabó retirando en 2006 la impopular medida, tras meses de protestas juveniles y sindicales. Esta es considerada la última gran victoria de los sindicatos franceses.

Binet deberá lograr unir a las diferentes facciones dentro la CGT. Según France Info, el sindicato está «dividido sobre la cuestión de aliarse o no con los otros sindicatos, sobre el hecho de bloquear o de negociar y de apoyar o no la energía nuclear».

La CGT cambia de líder en plena batalla de los sindicatos contra la reforma de las pensiones del presidente, Emmanuel Macron, aprobada por decreto y a la espera de la decisión del Consejo Constitucional. Binet dejó claro en el congreso del sindicato celebrado en Clermont-Ferrand que la organización que representa seguirá luchando contra el proyecto, como lo lleva haciendo desde hace dos meses y medio. «No habrá tregua, no habrá supresión, no habrá mediación», advirtió la nueva líder de la CGT.

La primera ministra se reunirá el miércoles con los sindicatos, después de meses sin recibirlos en Matignon. Lo hará la víspera de una nueva jornada de paros y manifestaciones contra la reforma de las pensiones, convocada el jueves 6 de marzo. La intersindical «unida» volverá a exigir al Gobierno la retirada de la reforma, confirmó Binet. La controvertida norma de las pensiones, a la que se oponen dos de cada tres franceses, fija en 64 años la edad mínima de jubilación y exige 43 años de cotizaciones para cobrar la prestación plena.

El Consejo Constitucional, la institución que preside el exprimer ministro Laurent Fabius, se pronunciará el próximo 14 de abril sobre la reforma. Deberá pronunciarse sobre la constitucionalidad del texto y sobre la admisibilidad de la petición de convocar un referéndum de iniciativa compartida (RIP) sobre la cuestión, tal y como que exige la oposición. Se espera que la decisión de dicho órgano zanje el acalorado debate en Francia sobre la reforma de las pensiones.