Marmita para despedir San Ginés

Multitudinaria fue también la misa que se celebró en la Cofradía de Pescadores y contó con la presencia de numerosas autoridades, encabezadas por el presidente de Cantabria, Miguel Ángel Revilla, que participó en la tradicional entrega de banderas a las embarcaciones locales, un acto que precedió al homenaje a los jubilados de la mar. La eucaristía estuvo presidida por el nuncio Pablo Puente, que en su discurso abogó por un cambio en la Iglesia y que haya mujeres sacerdotes. De hecho, en la misa de ayer, cuatro mujeres de la parroquia acompañaron al religioso oficiando la homilía.

Además de la misa mayor, la marmita centró ayer los actos festivos de San Ginés. La cita gastronómica, que alcanzó este año su sexta edición, no hace más que crecer en participación, como recordó Sergio Valle, de la Comisión de Fiestas. Valle recordó que el concurso de marmita comenzó a celebrarse con 65 cuadrillas y en estos seis años casi ha triplicado la participación. De hecho, este año la organización ha tenido que ampliar la oferta de parcelas ante la creciente demanda y aún así, ha habido grupos que han quedado fuera de concurso.

Entre 182 marmitas tuvo que deliberar el jurado, que finalmente premió la del grupo de Fidel, La Retura, PRC Colindres y La Marmita de Güela. La organización del concurso gastronómico tuvo que anular el primer premio debido a un problema de legibilidad del número de dorsal del plato que ganó el concurso, que se borró parcialmente. Cabe recordar que se trata de una cata ciega y para asegurar la imparcialidad de las valoraciones cada plato tiene en su reverso un número. En este caso, uno de los números se borró en la marmita ganadora y se produjo un error en su lectura y, por tanto, en el nombre de los ganadores.

En el momento de la entrega de los premios la portavoz de la cuadrilla informó a la organización de que no podían ser los ganadores porque finalmente su grupo no participó en el certamen, por lo que la organización se vio obligada a anular el primer premio. Para solventar este contratiempo y en aras de ser lo más justos posible, se decidió anular el primer premio que se reserva para el año que viene cuando se entregarán dos primeros premios.

Para la preparación de los guisos, la Cofradía repartió 182 bonitos -uno por cada grupo- y unos mil kilos de patatas, mientras que los cocineros de cada grupo pusieron de su parte su saber hacer en los fogones.

Valle celebró ayer el éxito del concurso gastronómico y de las fiestas en general, que han registrado una afluencia estimada superior a las 10.000 personas, especialmente durante los conciertos. En la jornada del viernes se estima que se repartieron alrededor de 1.700 raciones de ternera y cerdo y el sábado 700 kilos de sardinas.

Desde la organización se mostraron «satisfechos» con la respuesta de los vecinos y los miles de personas de otros municipios que han acompañado durante estos cuatro días a los colindreses.

La misma alegría manifestó el alcalde de Colindres, Javier Incera, que afirmó que la participación «ha estado en el nivel máximo», ya que «posiblemente el concierto de Macaco haya sido el día que más gente ha habido en el puerto de Colindres desde que existe este nuevo formato de fiestas». Por ello, puso en valor el trabajo realizado por la Comisión y la concejala de Fiestas, María Eugenia Castañeda, «que hacen posible que esto ocurra y llevan desde el primer día preocupados y trabajando para que todos disfrutemos».