Seña revivió el nacimiento de Jesús

Los numerosos asistentes disfrutaron de una recreación más auténtica que nunca, con una mejorada megafonía que aportó efectos sonoros que infundieron una mejor dramaturgia y realismo a la Cabalgata, completando el trabajo de los actores, además de unos diálogos más claros. Otra de las novedades de este año ha sido la entrega al público de folletos de mano para poder seguir el desarrollo del auto sacramental, ya que son muchas las escenas y es fácil perderse. El Auto Sacramental y Cabalgata de Reyes de Seña es una de las más destacadas de la región y sin duda, la más singular, ya que se celebra durante la mañana del día de Reyes.

La interpretación arrancó con la entrada del pueblo romano y el anuncio del empadronamiento, y continuó con la llegada de María y José al portal de Belén. Tras ellos irrumpieron en el centro de Seña los pastores, desatando la emoción de todos los espectadores, pero en especial, la de los más pequeños. Ovejas, corderos, burros y perros desfilaron por el centro de la localidad. Los pastores llegaron acompañados por sus rebaños y todos sus animales y los pastorcillos más pequeños realizaron el recorrido subidos en carros, e incluso transportados en cuévanos.

Ni luces, ni espectaculares carrozas, ni purpurina. Lo que hace especial a la Cabalgata de Seña es su sencillez, su realismo y la interpretación de los actores. Aunque la escenografía y el vestuario han ido mejorando año tras año, siempre sin desmarcarse de esa línea de autenticidad y sincronismo con la época que ha caracterizado esta cabalgata desde sus inicios.

La escena del diálogo entre los pastores y San José fue la novedad más destacada de este año, junto con la ampliación del número de intérpretes y el vestuario en torno al templo de Jerusalén. Con la incorporación de este nuevo pasaje, el auto sacramental cuenta con un total de once escenas.

Tras el paso de la corte de Herodes, los últimos en desfilar fueron los tres Reyes Magos y, posteriormente, se interpretó la presentación de Jesús en el templo, que este año estuvo encarnado por Martín Aguirre San Miguel, de siete meses de edad, el último niño nacido en Seña. La Cabalgata finalizó con las escenas de la huida a Egipto y la matanza de los inocentes.