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Jueves, 10 de octubre 2019, 08:59
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Por suerte no hubo que lamentar daños graves. Un incendio ha dado el susto de la mañana hoy en el polígono de Cros, en Maliaño. El suceso ha ocurrido en la empresa Martínez Lastra Escaleras cerca de las ocho de la mañana, cuando al parecer un silo de serrín ubicado dentro de las instalaciones ha prendido fuego y ha causado daños en los techos de esta nave y en los de la empresa aledaña, R Toka Pinturas. El humo emergía con fuerza por distintas partes de la cubierta mientras los propietarios y trabajadores de ambas, que no han sufrido ningún daño, compartían el sobresalto mientras los bomberos regaban el montón de serrín donde se originó la primera chispa.
La razón del incendio para ellos sigue siendo una incógnita. «No entendemos cómo ha podido prender. Llevamos quince años aquí y jamás nos había pasado esto», ha lamentado el dueño de Martínez Lastra Escaleras, de brazos cruzados frente a la puerta de las instalaciones. Él, empleados y vecinos del polígono se acercaban, una vez sofocado el fuego, para ver la gravedad de los daños. Múltiples agujeros en las chapas que cubren la nave, ahora chamuscadas y abiertas de par en par, ilustraban la altura de la columna de fuego y humo que los sobresaltó mientras trabajaban.
Visto el perjuicio material, «más bien superficial», según indicaron miembros de la brigada de Bomberos del Camargo que intervino sobre el foco, los empresarios compartían la mejor parte de lo ocurrido. «De lo malo, lo mejor», han coincidido, entre las idas y venidas que realizaban por dentro y fuera de la nave, donde todavía perdura el olor a plástico quemado. «No sé cómo trabajaremos hoy, si es que podemos trabajar. Habrá que taparlo con un toldo o algún material», extraían trabajadores de las dos compañías. Para entonces, el silo había dejado de echar humo. Además de los efectivos Parque de Bomberos de Camargo y Santander, se desplazaron hasta el lugar una ambulancia del 061 y patrullas de la Policía Local de Camargo y de la Guardia Civil.
No es el primer incendio que sorprende a los trabajadores del Polígono de Cros, y tampoco el más grave. Hace seis años, en 2013, un fuego mucho más grave se cobró salas destrozadas, techos caídos, maquinarias dañadas y material echado a perder en cuatro empresa. La peor parada, una fábrica de tablas de surf, Full& Cas, que quedó totalmente calcinada; además de otras dos, una de metacrilato y otra de básculas.
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