Los vecinos de Colindres ya disfrutan del remodelado Parque de La Charca
El alcalde Javier Incera asegura que «es una zona con cierto encanto para venir, pasear y pasar un rato agradable en un espacio muy tranquilo»
Colindres ha estrenado esta semana el remodelado Parque de La Charca. Una zona que se encontraba degradada y prácticamente en desuso y que, tras las obras de remodelación que se han llevado a cabo en los últimos meses, se convierte en un espacio más para el disfrute de los vecinos.
La nueva área cuenta con dos jardines diferenciados y con un diseño adecuado al entorno, funcionando como un espacio complementario al parque de La Alameda y los jardines de la Casa de Cultura y Casa Serafina, «pero con entidad propia», según explicaba el alcalde, Javier Incera. «Una zona con cierto encanto para venir, pasear y pasar un rato agradable en un espacio muy tranquilo». «Un espacio que estaba degradado lo hemos convertido en una zona de ocio de 3.000 metros cuadrados; es un parque con un encanto especial, con una lámina de agua que sigue simulando la existencia de una charca; una pasarela que hace que puedas atravesar la laguna, un mirador y una escalinata para poder sentarte». Así describe Incera esta obra que ha contado con la financiación de la Consejería y que estaba incluida en la orden de Obras Públicas del Gobierno de Cantabria.
Con un presupuesto superior a los 300.000 euros, se incluía en una petición conjunta en la que también se solicitó financiación para la rehabilitación de la casa de los Maestros y la rehabilitación de la Plaza de la Constitución.
Las tres obras se han ido finalizando en las últimas semanas y, de hecho, la remodelación de la fachada de la casa de los Maestros es otra de las inversiones que se ha recepcionado esta semana. Para la recepción por parte del Ayuntamiento de las obras de remodelación de la Plaza de la Constitución, habrá que esperar aún unos días. «Al coincidir con el periodo electoral, la recepción de estas obras se ha retrasado un poco», aclaraba el alcalde. «Han ido acabando todas en estos meses y al coincidir con el periodo estival, se ha ralentizado; hay que tener en cuenta que la recepción ha de realizarse con todas las obras completamente finalizadas y con todas las personas que han de firmar el acta de recepción», insistía.
Durante estos últimos días se han ido limando flecos que quedaban sueltos en cada uno de los proyectos. En el caso del parque de La Charca, Incera apuntaba que «la gente lo que va a percibir es que la lámina de agua está al cincuenta por ciento de su capacidad de llenado, porque hay una zona de plantas acuáticas, que aún han de enraizar y la laguna estará al cien por cien y totalmente óptima en el mes de septiembre».
En ese sentido, el regidor añadía que «agosto es un buen mes para estrenar este parque y que los vecinos puedan disfrutarlo con el buen tiempo».
La parcela conocida como La Charca, situada al suroeste del Ayuntamiento, en el entorno de la Alameda, en el Barrio de Cortinas, es de titularidad municipal y, hasta ahora, estaba colonizada por vegetación, principalmente juncos, lo que generaba molestias de olores e insectos. Con esta obra se ha logrado, por tanto, mejorar la calidad de vida de los residentes en la zona y la estética de este entorno emblemático.
El regidor hizo también referencia a localización del parque, que se encuentra en el punto de transición entre el Colindres urbano y el casco antiguo, de modo que «se convertirá en la entrada a la zona histórica del municipio, realzando su belleza y valor patrimonial». En cuanto a las otras obras que también han sido objeto de cofinanciación por parte del Gobierno de Cantabria, como la renovación de la Plaza de la Constitución, el alcalde ha señalado que se ha procedido a la sustitución integral del pavimento y del mobiliario. Además, se han aprovechado los trabajos para disponer de un sistema de iluminación led más eficiente. Su presupuesto era cercano a los 300.000 euros
El segundo de los proyectos, la rehabilitación de la fachada de la antigua Casa de los Maestros, que contaba con un presupuesto de poco más de 90.000 euros, ha permitido resolver los problemas de humedad que tenía el inmueble, que actualmente acoge el centro de la tercera edad, el albergue municipal y distintas asociaciones culturales.