El covid no apaga todos los escaparates de Cayón

Ha sido un año con más sombras que luces, y para compensar algo la balanza los comerciantes de Cayón no han dejado que la apatía y la pandemia les quitase su ganas por engalanar sus escaparates estas Navidades. Hay quienes se han animado a mantener la tradición pese a estar algo desanimados; mientras que otros han concebido que la crisis era el mayor aliciente para intentar mantener más que nunca la ilusión que trae estas fechas; y también los hay que han tirado la toalla. El resultado son 15 establecimientos del municipio que ya brillan con sus mejores ideas para intentar ganar uno de los cuatro premios del concurso decorativo que organiza el Ayuntamiento desde hace nueve años, y que la pasada edición tuvo 30 participantes (45 en 2018), con lo que se nota el efecto de la pandemia.

En la 'Papelería plumas' de La Penilla las hermanas Lorena y Rosa González no paran de envolver regalos para Reyes. «Llevamos ya un mes con encargos», dicen. El miércoles, mientras empaquetaba un tractor de juguete, Rosa le decía a su clienta que «hay que hacer este año un esfuerzo para sacar adelante las fiestas, son fechas para los niños y hay que mantener la inocencia tan maravillosa que tienen». Como remarca su hermana «la situación del covid nos ha dado empuje para no decaer con la decoración», y eso que llevan tres años participando sin llevarse premio.

«Pensábamos que ganaríamos algo la pasada edición con un árbol hecho de libros, pero nada», confiesan. Esta vez prueban suerte con un gran calendario de adviento con bolsas de papel, en la que cada una de las 24 fechas trae una propuesta de regalo de entre 5 y 40 euros. «Uno de los requisitos del concurso es que el montaje tenga que ver con el producto que vendes, por eso nosotras hemos preparado ideas para regalar tanto a niños, como a mujer y hombre», explican.

La situación contrasta con la de la de 'Pescados Monte Cueto', donde Carmen Cobo reconoce que el covid este año casi le hace trastabillar en su carrera de siete años porque «se sentía desanimada» y porque a raíz de la situación actual no dan abasto a trabajar. «Como no se puede salir del municipio y la gente no va a restaurantes se ha notado que vienen mucho más a la pescadería», apunta Cobo, que es la encargada de montar el escaparate todos los años, y casi ha perdido la cuenta de todos los premios que luce en su palmares.

Así las cosas, finalmente se animó a sacar una «idea sencilla» adelante, porque «prácticamente para nosotros es una obligación el hacerlo». Promete que ya habrá otras Navidades para retomar los trabajos tan laboriosos que hace otros años, como una sirena navideña o un árbol de mejillones, ideas que atraen a los clientes. «Sobre todo vienen si ganas, y sí que acudimos entre nosotros a ver qué hacen los otros comercios, pero es una competencia sana», apunta.

Cerca de la pescadería, esta semana en 'No me pises' Carmen Ruiz daba los últimos retoques a su escaparate, en el que todo lo que utiliza está hecho a mano gracias a la inestimable ayuda de su tía «que se le dan muy bien las manualidades». Este año han colocado un buzón y un gran trineo rojo cargado de productos de la tienda. Otras ediciones optaron, por ejemplo, por fabricar árboles navideños con papel de periódico. Además, parte de lo que hacen lo mantienen, como otro buzón que se encuentra dentro de la tienda y en el que algunos niños están cogiendo la costumbre de ir a entregar sus cartas a los Reyes. Ruiz explica que no se han alzado con muchos premios, pero sí que alcanzaron un tercer premio y, el que más les gustó obtener, uno concedido por el público «tanto a mi tía como a mí nos hizo mucha ilusión que los vecinos votaran por nosotras», recuerda.

Pocos premios, o más bien ninguno, se han llevado en la Farmacia Antonio Higuera, de Sarón. Pero el ánimo no languidece en absoluto y lo intentan una y otra vez desde hace cuatro años. Esta vez con un gran escenario en el que han dispuesto peldaños (uno por cada pueblo del valle) con fotografías de los edificios más emblemáticos de las localidades junto a iluminación. «Está el Ayuntamiento, iglesias, ermitas, lavaderos...», explica María José García, técnico de farmacia que se encarga de coordinar la creación aunque «todos» los compañeros «echan una mano», más este año, que ha sido uno de los que «más trabajo han asumido porque el diseño era complicado».

Otro de los participantes tradicionales, y que suenan siempre entre los favoritos, es la 'Guardería Coletitas y Cuquín' de La Penilla. Ahí han preparado un gran decorado navideño de cartón, simulando a una postal a gran tamaño, con dos niños en el centro, como guiño al sector al que pertenecen. Otras ediciones los elementos del escaparate los hacen con la ayuda de los pequeños que van a la guardería, pero está vez, «queríamos que fuera algo más elaborado por el año que hemos pasado», explica la propietaria, Lisi Martínez, que ha trabajado con sus monitoras para hacer «una propuesta muy mágica».

El jurado ha visitado los escaparates estos días y la entrega de premios será en la Biblioteca Municipal Jerónimo Arozamena. El primer premio tendrá una cuantía de 300 euros, el segundo será de 200 euros, y el tercero de 100 euros. Además, habrá un premio accésit dotado de 80 euros patrocinado por la Asociación de Comerciantes de Sarón decidido por la votación