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Javier López Estrada (derecha) y José Luis Urraca, en un pleno en Torrelavega.
Se acabaron los cumpleaños y las fiestas por jubilación "espontáneas"

Se acabaron los cumpleaños y las fiestas por jubilación "espontáneas"

El Ayuntamiento de Torrelavega obliga a los empleados municipales a pedir permiso al alcalde o al concejal de Personal antes de celebrar cualquier evento dentro de su horario laboral

DM .

Martes, 23 de agosto 2016, 13:28

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Los empleados municipales de Torrelavega están obligados a partir de ahora a pedir permiso para celebrar fiestas en horas de trabajo. Esta nueva norma ya ha sido comunicada a los afectados, en forma de una resolución remitida a la plantilla para asegurar "el correcto funcionamiento de los servicios públicos municipales". Se acaba, si es que las hubiera, con las fiestas de cumpleaños y despedidas por jubilación dentro de la jornada laboral de los funcionarios.

El concejal de Personal y Recursos Humanos, José Luis Urraca Casal, ha explicado en un comunicado a los trabajadores municipales que la autorización que deberán pedir para tales eventos podrá concederse por parte de la Alcaldía o por él mismo, aunque "en aras del menor formalismo posible", el permiso podrá "solicitarse y concederse de manera verbal".

El concejal detalla en su escrito enviado a los empleados municipales y a los sindicatos que las tradicionales celebraciones de cumpleaños o jubilaciones entre compañeros "son positivas en cuanto que suponen una manifestación de convivencia y de un buen clima laboral", pero reitera que los mismos deben ser previamente autorizados.

El nuevo sistema que ha implantado el equipo de gobierno PSOE-PRC sustituye la forma tradicional de celebración de estos eventos entre compañeros por jubilaciones o cumpleaños, que eran espontáneas y siempre una vez que las oficinas estaban cerradas al público.

Las quejas de los sindicatos

Para los sindicatos, este nuevo sistema supone "que el Gran Hermano llega a nuestro Ayuntamiento", ya que es "arbitrario" al exigirse el permiso "a unos sí y a otros no, dependiendo la categoría profesional".

Las mismas fuentes sindicales critican la medida que pretende implantar Urraca al considerar que la celebración de jubilaciones o cumpleaños entre compañeros "no es algo habitual" en horario de trabajo, ya que este tipo de encuentros sociales "se suelen organizar con cenas o comidas".

En este sentido, recuerdan que las celebraciones suelen consistir "en compartir unas tortillas media hora antes" de concluir la jornada de trabajo.

Además, CCOO reclama que el "mismo Gran Hermano" se aplique "para controlar a todo el mundo por igual, incluso a los políticos que cobrando la asistencia a las comisiones llegan tarde o se van antes de finalizar".

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