El criadero de aves El Redal, de Luey, inicia sus visitas guiadas

Desde que abrió al público en el mes de julio, poco a poco se están acercando cada vez más familias y grupos diversos, «pero sobre todo las familias con niños están encantadas».

El propietario destaca que los niños «se lo pasan súper bien porque ven animales diferentes», y aparte de los emús, que reciben a los visitantes al llegar, junto a los faisanes y los pavos reales, señala a una gallina especial: «Por ejemplo, esa es una sedosa japonesa, que aquí las llamamos 'de pelo' y es originaria de china». La explicación del granjero es interrumpida por otro animal, que parece que reclama que le defina. Y lo hace: «Ése es un gallo que es de indonesia, tiene una melanina muy fuerte y tiene ojos negros, carne negra, cresta negra...».

A sus indicaciones se unen los carteles colocados en cada una de las jaulas y a simple vista da la sensación de que este reclamo requiere una gran dedicación, aunque el propietario dice que «cuando te lo pasas bien es menos trabajo».