Laredo redescubre el 'Universo Gran'

Durante sus 15 años de trayectoria y gracias al apoyo institucional y a la colaboración de algunas de las máximas figuras del arte y la cultura de nuestro país como el propio Antonio López, José Manuel Blecua, Víctor Erice, Juan José Millás, o Francisco Calvo Serraller, la Fundación Enrique Gran ha abordado desde encuentros puramente expositivos por distintas ciudades hasta ciclos de conferencias, publicaciones, programaciones culturales como 'El Año Gran', o importantes colaboraciones en trabajos audiovisuales, caso del premiado documental de Marcos F. Aldaco, 'En los brazos de la luz', además de proyectos internacionales como la macro exposición 'Titanic : The Reconstruction' en la que se exhibe la obra de Enrique Gran 'El sueño del Titanic'; o más recientemente la presentación en concierto de los escritos de Gran como centro del homenaje en el XX aniversario de su fallecimiento.

Tras exhibirse la obra de Gran mediante diferentes proyectos en los principales espacios expositivos de Cantabria, quedaba pendiente la presencia en Laredo del universo creador del pintor y humanista cántabro, que se presentará ahora en el Centro de Exposiciones del Antiguo Ayuntamiento «con la intención de otorgar una oportunidad de dar a conocer todas las facetas del artista. Para ello se ha reunido obra mayor, una selección de dibujos, material audiovisual sobre su creación y su trayectoria, así como una representación de catálogos de muestras anteriores y efectos personales.

Enrique Gran a pesar de estar afincado en Madrid la mayor parte de su vida, «no perdonaba» las estancias estivales en Santander en las que además de ser un habitual en los cursos de la UIMP, y como buen melómano, asistía casi a diario a los encuentros del Festival Internacional. Tenía también una proximidad especial con Laredo precisamente debido a ese amor por la música, a través de su relación con uno de los mejores embajadores de esta localidad cántabra, la Coral Salvé, a la que dedicó algunos de sus dibujos. Uno de ellos se incluyó en el programa de mano del concierto homenaje del XX aniversario del fallecimiento de Gran, en el que precisamente la agrupación coral, dirigida por José Luis Ocejo, acompañó al periodista Luis del Olmo quien puso voz a los escritos del artista en una cita histórica en la Catedral de Santander.

Para la exposición de Laredo se han reunido representaciones simbólicas, materiales y emocionales de las distintas facetas creativas del artista por lo que se exhibirá bajo el título de «Universo Gran». Hay que recordar que con este mismo nombre la Fundación del pintor bautizó anteriores muestras multidisciplinares como la primera monumental retrospectiva que se celebró en Cádiz en el Castillo de Santa Catalina, cita en la que se exhibieron más de cien obras del artista y que recibió más de 40.000 visitantes.

Como atractivo añadido tanto para los amantes del arte como para el público en general, se prevé un programa de visitas guiadas en las que descubrir algunas curiosidades sobre la vida y la trayectoria profesional de este referente de la abstracción en la pintura española.

El académico y dramaturgo Francisco Nieva, bajo el epígrafe 'La leyenda de Enrique Gran' publicaba hace casi veinte años un artículo en el que respondía a una interrogante: «¿Ha sido Enrique Gran la figura más enigmática y romántica de su grupo y hasta de su tiempo? Es seguro que sí».

Desde pequeño ya derrochaba el talento que le convertiría en uno de los mejores artistas plásticos de su generación, protagonizando con su personal visión de lo abstracto, una de las más brillantes y personales trayectorias de la pintura española, avalada por los principales críticos de arte. Gran pertenecía a esa generación ilustre de pintores citados, estudiantes todos de la Academia de San Fernando de Madrid a comienzos de los 50.

Sobre su magnífica aportación a la pintura del siglo XX han escrito los máximos representantes del arte y la cultura de nuestro país como el poeta José Hierro, el pintor Pancho Cossío, el presidente de la Real Academia de Bellas Artes Antonio Bonet Correa, entre otros, siendo su legado pictórico «un referente imprescindible en el mundo de la abstracción tanto dentro como fuera de nuestras fronteras».

Sus obras se encuentran en las principales colecciones particulares de nuestro país, así como en museos y colecciones del Museo Nacional Centro de Arte Reina Sofía de Madrid, Museo de Arte Contemporáneo de Toledo, Museo de Bellas Artes de Santander, Museo Iconográfico del Quijote de México, el Storm King Art Center de Nueva York, o el Museo de la Unesco de Nairobi, entre otros.

Especialmente trascendente para el mundo del arte y el cine internacionales fue la película 'El sol del membrillo' que Gran protagonizó junto a Antonio López bajo la dirección de Víctor Erice. Premiada en el Festival de Cannes fue considerada la mejor película de la década de los 90, según un sondeo realizado por la Cinemateca de Toronto entre las principales filmotecas de todo el mundo. Tras su fallecimiento se sucedieron los homenajes, conferencias y exposiciones de su obra (Cádiz, Sevilla, Santander, Granada, ...) y reconocimientos al artista, como la elección de una pintura de Gran como icono mundial del centenario del hundimiento del Titanic, o la composición 'Cuarteto de cuerda nº6', del Premio Príncipe de Viana, Agustín González Acilú, dedicada al pintor con su estreno mundial en la 58 edición del FIS.

La Fundación Enrique Gran, entidad sin ánimo de lucro que preside su sobrina Begoña Merino Gran, cuyo fin es la conservación, estudio, pública exposición y difusión de la memoria y de la obra del pintor, «mantiene con la colaboración institucional y de destacadas personalidades de la cultura nacional, una intensa actividad en cumplimiento de su objeto fundacional».

En el último encuentro conmemorativo sobre su legado bajo el título 'Esencia de Gran' se presentan los escritos y reflexiones que el propio artista hizo sobre su trayectoria vital y pictórica, escritos recogidos en una publicación. La cita de Laredo se suma, además de contar con la presencia permanente en Santander de Gran a través del monumento de Gema Soldevilla en El Sardinero, a la mencionada antológica en el Castillo de Santa Catalina en Cádiz; la muestra en Sevilla en el Pabellón de la Navegación; y las exposiciones realizadas tanto en Santander, en el Centro Cultural de la Fundación Caja Cantabria, Parlamento de Cantabria, MAS y Palacete del Embarcadero; como en la región, en el Palacio de Sobrellano de Comillas, Palacio de Caja Cantabria en Santillana y Centro de Estudios Lebaniegos en Potes.

Aficionado a la música, lo onírico y lo cromático, la búsqueda incesante asomó en un ingente libro-catálogo y en la muestra bajo comisariado de Raúl Reyes.

Las «figuras enigmáticas» del pintor santanderino, concebidas desde el romanticismo, la ironía, la ternura y la «monstruosidad», que habitaron buena parte de su pintura, afloraron en el décimo aniversario de la muerte del pintor. «La pintura, además de ayudarme a vivir, me sirve para intentar encontrar la verdad», escribió Gran.