Perceberos invisibles en Suances

El traje de neopreno de camuflaje les hacía casi invisibles en las rocas, pero los dos buceadores que el pasado miércoles fueron a coger ilegalmente percebes a la Isla de los Conejos, junto a Suances, no contaron con dos detalles que, al final, los delataron: la zodiac neumática que dejaron mal escondida y las cámaras térmicas de la Guardia Civil.

Eran las diez de la mañana cuando un barco del Servicio Marítimo destinado a una operación contra el marisqueo furtivo, puesta en marcha ese día debido a la mayor bajamar del año, llegó a la altura de Suances. Los agentes vieron, en una pequeña isla cercana a la de Los Conejos, una embarcación amarrada y escondida entre las rocas.

Vigilancia

Esa posible evidencia de pesca ilegal les hizo sospechar aún más cuando, tras un primer vistazo, no descubrieron a nadie por la zona, según informaron fuentes del Cuerpo a este periódico. La Guardia Civil decidió entonces dejar a dos agentes allí en una lancha neumática mientras la embarcación mayor se alejó. Ayudados por prismáticos y cámaras térmicas barrieron la zona durante varios minutos en busca de pescadores ilegales, hasta que, por fin, uno de ellos creyó distinguir a una persona. No fueron los únicos. Los submarinistas también se percataron de su presencia. Uno de ellos se movió hasta una zona de rocas, donde se quedó quieto para que el traje de camuflaje hiciera su trabajo y se mimetizara con el color de la piedra. Pero una sombra lo delató.

La embarcación regresó para cerrar todo el área y evitar que escapasen mientras que dos agentes saltaron a la isla para identificar a los perceberos, quienes no quisieron confesar dónde habían comprado unos trajes cuyo coste oscila entre los 150 y los 200 euros. Los buceadores llevaban encima una red-bolsa de pesca con unos tres kilos de percebes, así como dos rajadas para la extracción del molusco, sin tener autorización para ello.

Según informaron fuentes de la Guardia Civil, es la primera vez que se encuentran con mariscadores furtivos con este tipo de trajes de camuflaje para intentar no ser detectados.

17 personas denunciadas

Durante ese mismo día, la Guardia Civil sorprendió a 17 personas, en la costa entre San Vicente de la Barquera y Suances, cogiendo percebes sin licencia. En total, los agentes del Seprona, de la patrulla fiscal y del Servicio Marítimo intervinieron 15 kilos de percebes -que fueron entregados a centros benéficos-, cinco rajadas y un fusil de pesca submarina.

En lo que va de año, la Guardia Civil de Cantabria ha formulado un total de 972 denuncias por infracciones en materia de pesca marítima, en muchas de las ocasiones por sorprender a personas que mariscaban sin contar con la preceptiva autorización, en otras por la recogida de cebo sin permiso, fuera de cupo o en zona vedada y por captura de especímenes de tallas inferiores a las reglamentadas, entre otras. Se han decomisado más de 200 kilos de percebes, 151 kilos de erizos de mar, así como pulpos y otros pescados.