Covid-19: otro factor más en el cambio
LOS LÍDERES ANTE LA CRISIS ·
Secciones
Servicios
Destacamos
LOS LÍDERES ANTE LA CRISIS ·
El comercio internacional ha sido uno de los principales vectores del crecimiento económico mundial en las últimas décadas. Desde 1980, las curvas de crecimiento del ... comercio internacional y del PIB mundial muestran gran correlación, incluyendo los desplomes de la actividad en 1982, 2001 o 2009.
Sin embargo, tras la anterior gran crisis, la actividad comercial global ya empezó a dar síntomas de agotamiento, con tasas de crecimiento anual más moderadas que en décadas anteriores. De forma más concreta, en sus últimos informes anuales, la Organización Mundial del Comercio ha venido alertando sobre un importante incremento de medidas proteccionistas.
De acuerdo con lo expresado por la citada organización, existe una tendencia de las principales economías mundiales hacia el proteccionismo que puede tener su origen en varios factores.
En primer lugar, hay una preocupación justificada y sostenida en los últimos años por la seguridad (11S) sobre los tráficos internacionales, lo cual ha redundado en la implementación de procedimientos y controles que, aplicados de un modo incorrecto, pueden suponer ineficiencias y trabas sobre el comercio.
Por otra parte, la falta de capacidad de los organismos internacionales para la resolución de disputas muestra que las medidas comerciales proteccionistas se están empleando como mecanismos de resolución de conflictos geopolíticos. Leasé conflicto China-EE UU.
Y por último, la pandemia del Covid-19 está poniendo al límite la resiliencia de las cadenas de suministro globales. Adicionalmente, está dejando patente la limitada capacidad de producción local o regional de determinados productos, como los sanitarios o de primera necesidad.
Estos factores podrían ser un detonante para la adopción de medidas proteccionistas orientadas a fomentar la producción local y fortalecer las cadenas de suministro a través de redes y estructuras regionales, en contraposición a las globales que se han venido imponiendo durante la época de liberalización del comercio que hemos vivido hasta el momento.
Este cambio de paradigma no obedece únicamente a razones comerciales.
En mi opinión las claves para Europa son dos: la primera, la estabilidad política en los países miembros (con grandes acuerdos de Estado), y la segunda retroceder a la filosofía del Tratado de Roma de una Europa de ciudadanos iguales, en las que el beneficio del grupo esté por encima del individual.
En conclusión, dicen que en la vida pasan varios trenes y que hay que agarrarse a alguno: para Europa, y para España, éste es posiblemente el último.
El nuevo escenario va a poner a prueba la capacidad de los Estados a generar una nueva economía, y sobre todo va a ser el test riguroso de la capacidad de la Unión Europea de liderar, y sobre todo de aprovechar las nuevas oportunidades. Hay que liderar, desde los entes más pequeños a los macros, nuestro propio cambio.
¿Tienes una suscripción? Inicia sesión
Publicidad
Publicidad
Te puede interesar
Publicidad
Publicidad
Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.
Reporta un error en esta noticia
Comentar es una ventaja exclusiva para suscriptores
¿Ya eres suscriptor?
Inicia sesiónNecesitas ser suscriptor para poder votar.