Castilla evita el cierre de la temporada

La Junta de Castilla y León aprobó recientemente un decreto de especies cinegéticas en un tiempo récord para no tener que suspender la caza menor en su territorio, donde por estas fechas decenas de miles de aficionados cántabros tiran a la perdiz, el conejo y la becada. La ausencia del decreto -que define las especies que se pueden abatir, así como su aprovechamiento y el control de la fauna silvestre- había sido esgrimida por el Tribunal Superior castellano leonés para dejar sin efecto la orden de caza del año 2011, un olvido del Gobierno regional de Castilla y León que, si no era subsanado, le obligaba poner fin a la temporada antes de la fecha prevista inicialmente, el próximo 29 de enero.