La mejora de la calle Lábaro eliminará diez plazas de aparcamiento de la OLA

La pequeña calle Lábaro, que conecta Floranes con la plaza de Numancia, estrenará nueva imagen en febrero de 2017. En esa fecha está previsto que concluyan las obras de renovación urbana que arrancaron ayer y que tienen como fin renovar toda la imagen y los servicios de esta vía. Los trabajos, con un presupuesto de 181.500 euros y que ejecuta la empresa Arruti, consistirán principalmente en la renovación de los servicios de abastecimiento y saneamiento y el ensanche de las aceras.

Y para que los peatones circulen con seguridad será necesario eliminar diez plazas de aparcamiento de OLA de un lateral de la calle. Las aceras, actualmente muy estrechas, alcanzarán un ancho mínimo de 1,80 metros y en algunos puntos llegarán a los 2,20 metros.

El alcalde Iñigo de la Serna, que asistió ayer al comienzo de estas obras, dijo que se realizan a petición de los vecinos de la zona, quienes han aportado sus sugerencias y observaciones al proyecto. Como explica el concejal de Infraestructuras, César Díaz, «con estas obras, se mejorará la geometría de la calle, principalmente en su salida a la plaza de Numancia donde había algún problema al coincidir junto con la entrada al aparcamiento subterráneo».

La sección de calzada tendrá 3,15 metros de ancho y habrá una línea de aparcamiento en cordón de 2,10. Los trabajos se aprovecharán como es habitual para proceder a la renovación de los servicios, fundamentalmente de la red de abastecimiento y saneamiento. También se instalarán nuevas luminarias, así como mobiliario urbano (bancos y papeleras). Durante los cinco meses que duren las obras, se garantizará a los vecinos el acceso a los garajes que hay al fondo de la calle.

Como explicó el alcalde, esta actuación se desarrolla después de «un proceso de regeneración muy importante del entorno, como ha sido la mejora de Floranes, la reordenación del tráfico de Numancia, las escaleras mecánicas de Antonio Mendoza y la construccion del centro cívico de Numancia», pero la calle Lábaro «había quedado en cierta medida desplazada». «Los vecinos hicieron solicitudes formales y se les ha atendido», acabó.