Tres horas y 200 piezas para montar el T-rex en Santander

Charlie Lods se está poniendo los guantes para comenzar la faena. Son las ocho y media de la mañana y el Palacio de Exposiciones de Santander acaba de abrir la puerta trasera para dar paso a los doce camiones -uno por uno- que trasladan la exposición itinerante de dinosaurios más grande de Europa: Expo Dino XXL.

Lods ha montado los esqueletos del Tyrannosaurus Rex y el Spinosaurus cerca de mil veces, así que se enfrenta al trabajo como quien ha hecho el mismo puzzle cada día durante tres años. Tardará tres horas en hacer casar las 200 piezas junto a otros dos operarios. «El primer día nos costó, ahora ya no tanto. Lo más importante es tener mucho cuidado al sacarlo, son piezas muy delicadas que no pueden llevar ningún golpe», explica.

En el otro extremo del Palacio una parte del equipo baja las réplicas del camión mientras la otra forra con papel film las ruedas del tractor que se encarga de mover de un lado a otro las piezas. «El suelo es delicado y no queremos estropearlo», dicen.

A las doce de la mañana ya está instalado el diplodocus, uno de los más grandes -de diez metros de longitud y cinco de alto-: «Es una pieza robotizada que tiene vida, cuando respira mueve la panza», explica a este periódico José María Canal, uno de los organizadores de la muestra. Sin embargo, por mucho poderío que muestre no tiene nada que hacer al lado del «rey», el T-rex: «Vuelve locos a los niños. Es el que más gusta. Spielberg ha hecho mucho bien con Jurassic Park», cuenta Canal.

Gran parte de este viaje al pasado, en el que hay dinosaurios que se mueven y respiran y otros con lo que se puede posar y hacer fotografías, es propiedad de la colección privada de la familia francesa Lods. A Santander traen más de cien figuras entre animales jurásicos, hombres neandertales, mamuts y osos de las cavernas. Además, se instalará un 'cine' en el que proyectarán el documental 'Planeta de los dinosaurios', que de una manera más científica, cuenta para todas las edades curiosidades sobre estos animales que se extinguieron hace sesenta y cinco millones de años.

«¿Nos hemos pasado con la publicidad? Seguramente, pero mejor eso que quedarse corto», dice José María Canal, uno de los responsables de la muestra. Se refiere a los más de mil carteles que han instalado por todo Santander, «la única forma que hay de que se entere la gente», se justifica.

Santander era la ciudad del norte que les quedaba por visitar. Ya lo intentaron en años anteriores, pero no alcanzaron ningún acuerdo económico con el Ayuntamiento de Santander. Sin embargo, este verano no querían dejar pasar la oportunidad de hacer parada en la capital cántabra, y aunque la luz que entra por los ventanales del techo del Palacio de Exposiciones no es la adecuada para la muestra, «porque las luces de los animales no llaman tanto la atención», están satisfechos del enclave: «No puede ser mejor, es perfecto para esta muestra. Le da caché».

Las cien réplicas de los dinosaurios y también otras piezas como hombres neandertales, mamuts y osos de las cavernas ocuparán 2.500 metros cuadrados del Palacio. Tras dos días de intenso montaje, la muestra abrirá sus puertas este sábado y domingo en horario ininterrumpido de 11.00 a 21.00 horas. El precio de las entradas es de nueve euros para adultos y siete para niños (de 2 a 12 años). La venta anticipada acumula ya 4.000 tiques vendidos.