Vicente Mediavilla vuelve a Santander como magistrado del Contencioso Nº1
El exdirigente del PRC tenía hasta ahora su plaza en Burgos, aunque lleva seis años en servicios especiales en el Tribunal Supremo, primero, y en el Constitucional, después
El magistrado y exdirigente y exconsejero del PRC Vicente Mediavilla será el nuevo titular del Juzgado de lo Contencioso-Administrativo Nº1 de Santander. El que fue mano derecha de Miguel Ángel Revilla durante su etapa en política vuelve, así, a Cantabria después de seis años ejerciendo en servicios especiales en el Tribunal Supremo, primero, y en el Constitucional, después. Mediavilla, cuya plaza hasta ahora estaba en Burgos, sucederá en el cargo a Juan Varea, quien se trasladó en octubre a la Sala de lo Contencioso-Administrativo del Tribunal Superior de Justicia de Cantabria (TSJC).
El excandidato del PRC a la Alcaldía de Santander en 2007 se pondrá ahora al frente de un juzgado que, precisamente, se dedica a resolver litigios entre ciudadanos y la Administración pública, así como los que surgen entre las propias administraciones.
Mediavilla tendrá que elegir ahora entre continuar en Madrid con los servicios especiales en el Constitucional o incorporarse en enero a su nueva plaza en Santander.
El Juzgado Nº1 de lo Contencioso resuelve los litigios entre los ciudadanos y la Administración pública
El magistrado cántabro debe elegir entre seguir en el Constitucional o incorporarse en enero a su nueva plaza
Letrado del Gobierno cántabro por oposición desde 1995, Mediavilla fue consejero de Presidencia en las dos primeras legislaturas de la coalición PRC-PSOE, entre 2003 y 2011. Entre sus principales logros en aquella etapa destaca la aprobación del Plan de Ordenación del Litoral (POL) en febrero de 2011, documento que fijó la ordenación de los 37 municipios costeros y frenó la especulación urbanística. El PP llevó el POL al Tribunal Constitucional, que avaló íntegramente el texto. Bajo su mandato como consejero asumió, además, las competencias en materia de Justicia.
Mediavilla dejó la política en 2011 y ejerció como letrado del Gobierno, hasta que en 2019 dio el salto a la judicatura después de superar el concurso oposición convocado a nivel nacional por el Consejo General del Poder Judicial (CGPJ), al que se presentaron más de un centenar de aspirantes. Consiguió su plaza en Girona, primero, y Burgos después.
El letrado cántabro culminaba así una de sus principales aspiraciones profesionales, el acceso a la judicatura, que ya había intentado en 2011 cuando, siendo consejero de Presidencia y Justicia, fue incluido a propuesta del Parlamento en la terna de candidatos para ocupar la plaza de magistrado autonómico del Tribunal Superior de Justicia de Cantabria (TSJC), que había quedado vacante.
La inclusión del entonces político entre los nombres propuestos para ocupar la plaza de juez en la Sala de lo Civil y Penal provocó protestas de las asociaciones de jueces y fiscales, que lo vieron como un ataque a la independencia judicial, y finalmente no resultó elegido. Ese día, Mediavilla, lejos de amilanarse, se prometió a sí mismo que alcanzaría la condición de miembro del Poder Judicial superando las oposiciones que fueran necesarias. Y así fue. En la primera convocatoria realizada por el Consejo General del Poder Judicial superó el proceso y se convirtió en magistrado.
Mediavilla llegó al Supremo hace seis años para trabajar en el Gabinete Técnico adscrito a su área contencioso-administrativa. Fue otro magistrado cántabro, César Tolosa, presidente de la Sala Tercera antes de marcharse al Constitucional, el que en 2022 pidió ayuda para hacer frente a las miles de reclamaciones patrimoniales por las pérdidas ocasionadas por las restricciones durante la pandemia.
Con solo 25 magistrados (incluido su presidente), se quedaba en el mínimo legal para constituir sus cinco secciones, por lo que se reforzó con tres plazas de letrados coordinadores en el Gabinete Técnico del tribunal, entre los que se encontraba Vicente Mediavilla.
Dos años después, en diciembre de 2024, se mudó al Tribunal Constitucional, donde sigue en estos momentos, en su sección contencioso-administrativa, encargándose de los recursos de amparo y en labores de apoyo a los magistrados.