La Pulpería Virgen del Carmen, uno de los locales de moda de El Astillero
Raquel Vázquez es la responsable del establecimiento que goza de buena clientela por su carta y por sus cañas a un euro
Raquel Vázquez ha cogido las riendas de La Pulpería Virgen del Carmen. Ella, junto a su hermano, Pablo, su cuñada, Oyane Allende, y su padre, Jaime -en la cocina- han asumido el relevo de un establecimiento que lleva cerca de seis años en funcionamiento detrás del Ayuntamiento de El Astillero. «Llevamos aquí desde el 8 de junio y la verdad es que el verano ha sido muy bueno, Aunque ahora es una temporada floja, no nos podemos quejar... Viene además lo mejor», asegura Pablo con una sonrisa.
El personal que ahora tira del carro del nuevo establecimiento de La Pulpería es eminentemente familiar, aunque todos ellos se apoyan los fines de semana en Samanta, la camarera de refuerzo que les echa una mano los dos días fuertes de la semana.
Ahora, aunque el sector se encuentra en temporada baja, en El Astillero, las próximas fiestas de San José reportarán mayor dinamismo a los comercios. «Pondremos una barra fuera, en la calle, para el fin de semana fuerte del 16 y 17 de marzo, con el fin de ofrecer un mejor servicio para tanta afluencia de gente», asegura Pablo. «San José es siempre una temporada fuerte para los hosteleros y, aunque dependemos de las condiciones climatológicas, las previsiones son muy buenas este año».
Las rabas, el pulpo a la gallega y los cocidos, el mayor reclamo del establecimiento
Al margen, la Pulpería ofrece todos los días cañas a un euro, siendo esta una de las principales ofertas que mayor reclamo generan entre los clientes. «También tenemos las cervezas medias, a 1,4 euros», añade Pablo, especificando que se trata de una marca concreta.
La nueva Pulpería conserva la estructura original. La barra, formando esquina, en el espacio principal, y el comedor en la planta baja, independiente y con cerca de 25 personas de capacidad, que funciona muy bien sobre todo para comidas y cenas, apostilla Pablo. La terraza completa el servicio del establecimiento.
Dentro de las raciones, las rabas -también para celiacos- y el pulpo a feira (a la gallega) siguen siendo uno de los principales reclamos del establecimiento que, con la mano del cocinero, parece haber ganado puntos y buena fama entre la clientela. «La verdad es que ambas raciones funcionan muy bien, también porque mi padre cocina que da gusto y porque tenemos buena materia prima. El pulpo, sin ir más lejos, viene del Cantábrico y en concreto, se lo cogemos a pescadores de diversos puntos de la región, y eso se nota».
Otra de las raciones que funcionan muy bien son los callos y las manitas. «Lo suele hacer mi padre y hay gente que viene todos los fines de semana a comer orejas». Las patatas ali-oli también funcionan muy bien... «La verdad es que mi padre tiene muy buena mano, sobre todo con los cocidos». Y aquí viene la anécdota. «Un día mi padre hizo unas alubias con bonito en una comida con unos amigos y le quedaron estupendamente buenas. Pues bien, estaba una pareja de vascos invitados. Las probaron, por supuesto. Y les encantaron. Tanto, que le preguntaron a mi padre la receta. Mi padre se la dio y al tiempo la patentaron... ¡Sé que les está yendo muy bien a costa de la receta de mi padre!», añade el joven, con ironía.
Los platos a cuchara cobran mayor presencia en el establecimiento los domingos. «Empieza la gente a reservar ya desde por la mañana y muchas veces nos quedamos ya sin raciones a medio día... La verdad que suelen funcionar muy bien, ya sea cocido montañés, potaje de garbanzos, verdinas con almejas, garbanzos con callos, alubias con pulpo... ¡Lo que surja!. Porque suele cambiar la receta cada dos por tres...Si le tengo que recomendar uno de los platos que hace mi padre, las alubias con pulpo. Son sin duda exquisitas».
Comentar es una ventaja exclusiva para suscriptores
¿Ya eres suscriptor?
Inicia sesiónNecesitas ser suscriptor para poder votar.