
Secciones
Servicios
Destacamos
a plena presencialidad, la ilusión por abrir una nueva etapa y la necesidad de devolver a la UIMP su trono como «un espacio de ... convivencia interdisciplinar e intergeneracional» de referencia dentro del mundo académico son los pilares que fijan la esperada renovación de la Universidad Internacional Menéndez Pelayo. El nuevo equipo de Gobierno de la decana de las universidades de verano, encabezado por el rector Carlos Andradas, exmandatario de la Complutense, ultima la programación de los Cursos de Verano 2022, periodo que supondrá el inicio oficial académico de la celebración de los 90 años de la creación de la institución.
El próximo jueves, día 21, el Hall Real del Palacio de La Magdalena albergará la puesta de largo de la UIMP que en algunos sectores se observa ya como una especie de 'año cero' que marque un antes y un después en lo que atañe a identidad, proyección y recuperación de la Universidad como foco de atención y lugar de referencia para el debate de las cuestiones sociales más vivas. Desde la propia UIMP se ha subrayado esa ilusión «con la perspectiva de recuperar la plena presencialidad» y una gestión que haga posible de nuevo recobrar la definición de su espacio.
Los cursos de verano, que mantendrán su estructura básica, de seminarios a talleres, y que potenciarán las Escuelas, se desarrollarán del 20 de junio al 9 de septiembre con un doble objetivo: «Reconectar con el espíritu UIMP», desde las palabras fundacionales del poeta Pedro Salinas, secretario general de la institución en 1933, a la oportunidad de vincular el 90 aniversario a «la reivindicación de la institución como un espacio de convivencia, cultivador de ideas y faro del conocimiento». Artes y humanidades, biología y biomedicina, ciencia y tecnología, ciencias sociales y los cursos avanzados de español configuran los bloques principales de actividad.
Las propuestas de la oferta académica y la respuesta del alumnado son el baremo principal a la hora de evaluar el cambio esperado. Como ya se avanzó, el poeta y escritor Mircea Cartarescu, el historiador Juan Pablo Fusi, el músico Tomás Marco, el artista Jaume Plensa y Rafael Yuste, neurobiólogo e ideólogo del proyecto Brain, son algunos de los nombres que protagonizarán el verano de la UIMP. José Hierro, María Blanchard y Severiano Ballesteros serán objeto de foros monográficos.
La UIMP abrió esta semana el plazo de solicitud de becas para la asistencia a las actividades académicas que se celebrarán en sus Centros Docentes y de Investigación este año, entre las que se encuentra La Magdalena. Además, las becas cubrirán actividades de las sedes de Cuenca, Galicia, Madrid, Sevilla, Tenerife y Valencia. La cuantía total de 220.000 euros –de los que 120.000 son aportados por Santander Universidades– está destinada a estudiantes y titulados universitarios, que deberán ser nacionales españoles, nacionales de otro país de la UE o extracomunitarios con residencia legal en España. El plazo concluye el 3 de mayo.
La literatura con José María Merino, el mundo tras la guerra de Ucrania, el Encuentro de Coleccionismo, la Escuela de Psiquiatría, La Barraca en Santander o La historia de España desde la novela histórica son algunos de los terrenos previstos. Del cáncer al suicidio, de la pandemia a la economía digital y las telecomunicaciones, pasando por los 40 años del Estatuto de Autonomía de Cantabria, además de los diferentes encuentros, escuelas y talleres, son parte de la ingente oferta.
Las expectativas, declaración de principios e intenciones de la nueva UIMP comenzaron ya a las pocas horas de la dimisión de Luz Morán como rectora en septiembre del pasado año. El Ministerio interpretaba entonces su marcha como un «cambio de etapa» e inicio de un «nuevo proyecto». Después, Carlos Andradas en su toma de posesión ya apelaba a «reinventar la UIMP» como lema de su mandato. Para arropar a la programación el rector ya ha manifestado en entrevistas y tribunas su deseo de consolidar una UIMP «más local», abierta a la ciudad e insertada en su entorno; la intención de «potenciar la presencialidad y la convivencia» para la formación y la creación; «ayudar a encontrar respuestas» a todas las cuestiones que acechan y «proyectar la internacionalidad» especialmente en América Latina.
Como asignaturas pendientes y problemas enquistados de la UIMP en estos años se ha destacado la carencia de medios, tanto de recursos económicos como de personal, la pérdida progresiva de fuerza mediática, ausencia de sintonía con algunas cuestiones sociales a la hora de abordar la programación, desequilibrios entre disciplinas, o la falta de renovación de un modelo en cierto modo agotado.
¿Tienes una suscripción? Inicia sesión
Publicidad
Publicidad
Te puede interesar
Publicidad
Publicidad
Recomendaciones para ti
Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.
Reporta un error en esta noticia
Comentar es una ventaja exclusiva para suscriptores
¿Ya eres suscriptor?
Inicia sesiónNecesitas ser suscriptor para poder votar.