Tendencias de muerte

Los funerales laicos están al alza. Son entendidos como ceremonias para recordar al fallecido sin simbología religiosa. También cuentan con un ritual, pero está menos popularizado. Incluye música, lecturas conmemorativas y en algunos casos, palabras de homenaje a cargo de los familiares del finado. Si eso no es posible debido a la presumible emoción, habrá intérpretes encargados de poner voz al recuerdo que las familias quieren componer.

Todas las empresas funerarias coinciden en señalar la importancia de que cada funeral sea único y refleje la manera en que sus familiares quieren despedirse de él. Esto incluye el laicismo en las ceremonias.

Según los datos que maneja la empresa Mémora, las ceremonias laicas suponen un 15% de los funerales celebrados en 2013 que ascendieron a 60.720. El importe económico generado por este sector supuso 175 millones de euros. Pero no son la única novedad en este mercado estable.

Los datos de Cantabria indican que en 2012 -fecha del último balance-fallecieron 5.812 personas. Desde hace varias semanas, se ofrece como alternativa la realización de una práctica que va asentándose en otras comunidades.

Darse a conocer

Coincidiendo con el Día de todos los Santos, cuando mayor afluencia se produce a los cementerios, la empresa Albia realizó una demostración con varios músicos en el tanatorio de Río Cabo (Torrelavega). El objetivo era ilustrar de forma práctica en qué consiste lo que han llamado Homenaje a la vida y ante el que los visitantes responden con sorpresa por la novedad en palabras del gerente, Germán Pérez.

La planificación incluye una entrevista previa a la familia del difunto, en la que un equipo de profesionales elabora el guión que resume los aspectos más significativos de su vida. Ese guión será dramatizado por un intérprete, que estará acompañado por uno o varios instrumentos en directo durante la ceremonia. Para conservar ese recuerdo, en las semanas siguientes al homenaje, se regalará a los familiares un libro recordatorio del guión escrito junto con un CD con la música interpretada.

Este recordatorio es un servicio que ofrece también el grupo Funcantabria, bajo la denominación de Historia de vida. Pretende, según señalan, ser un homenaje entrañable hacia la persona que deseamos recordar.

Evolución del sector

La Revista Funeraria, publicación de referencia en este campo, recomienda la adecuación de las instalaciones funerarias a las nuevas tendencias, contando con capillas multiconfesionales y habilitando columbarios en un espacio que facilite los usos y costumbres laicas y católicas, diseñando tanto ceremonias religiosas como civiles.

Indican, además, que la incineración es un sistema que va implantándose, responde más a un cambio de mentalidad que a razones puramente económicas. De 1983 a 2013 se ha pasado de 100 a 200 hornos crematorios en España pasando el uso de la incieración del 5 al 50%.

Entre las tendencias más recientes está , por ejemplo, la que ofrece la empresa Áltima, que plantea la customización de los ataúdes escogiendo entre diferentes imágenes temáticas (escudos de fútbol, paisajes diversos, motivos florales, instrumentos musicales o religiosos). Los vinilos se elaboran con materiales respetuosos con el medio ambiente. De momento sólo se ofrece en Barcelona y Girona.

Este respeto al medio ambiente es también fundamental para la empresa Limbo, que ofrece un catálogo de productos funerarios ecológicos. Una amplia gama de colgantes donde llevar una pequeña porción de cenizas o cabello del ser querido. Urnas confeccionadas con arena y aglutinantes naturales de origen vegetal como el almidón, cuyo fin es devolver a la naturaleza las cenizas de un modo eficiente y respetuoso con el medio ambiente. Dentro de esa oferta, también incluyen una gama de urnas para mascotas, igualmente ecológicas.

Certifican que la biodegradación no afecta al entorno aunque recomiendan el uso de uno u otro modelo según vayan destinadas a tierra o mar. El tapón de las urnas puede retirarse y utilizarse para cultivar un árbol. Finalmente, en oro, plata, oro blanco, con circonitas o brillantes, puede diseñarse una de las joyas con la huella dactilar del ser querido fallecido impresa.

Tecnología funeraria

Dentro de las novedades en I+D+i aplicado al ámbito funerario está un nuevo producto que sustituye al zinc del interior de los féretros por una bolsa biodegradable elaborada con varias capas de algodón y bioplástico.

Otra modalidad es la que presenta la empresa Yatri, de reciente creación, que ofrece un servicio único, innovador y exclusivo a nivel mundial con el traslado de las cenizas del finado hasta donde sea su último deseo. Entre los destinos a los que han llegado están los Alpes Suizos, un glaciar en Argentina o las pirámides de Egipto.

Más allá, incluso, pueden llegar las cenizas: a la estratosfera. En un globo de helio, que contará con una cámara. Al alcanzar los 35.000 metros de altura, el globo explota por falta de presión y esparce las cenizas, que quedan en suspensión en el espacio. El coste de esta opción ronda los 4.000 euros y podrá realizarse una grabación sobre esa ascensión que se entrega a los familiares si lo desean.

Las nuevas tecnologías no son ajenas a los avances en este sector mortuorio. Así, empresas como Deadsocial o Ifidie, están diseñadas para enviar una serie de mensajes que sólo serán publicados una que vez que el usuario ha fallecido, permitiendo transmitir un adiós personalizado.

El método de funcionamiento parte del envío a la persona suscrita de un e-mail cada dos semanas para comprobar si está vivo. En caso de no responder a sucesivos correos, se envía una segunda comunicación de verificación a la ersona designada para confirmar que el usuario ha muerto.

También es posible encontrar webs como 100Memories o Lifestory, que tienen carácter conmemorativo y en las que amigos y familiares pueden compartir historias y fotos.

En esta línea surgen propuestas en España como surecuerdo.com. Se trata de un espacio web gratuito donde generar condolencias así como enviar flores o velas virtuales a modo de homenaje. En un blog común se pueden añadir anécdotas sobre la persona fallecida añadiendo fotos o vídeos, o completando un árbol genealógico virtual.

Funerales en streaming

Esta es, casi con seguridad, la más reciente novedad en materia funeraria. La familia podrá llevarse grabada y editada la ceremonia, inmediatamente después de su celebración.

Con diferentes cámaras se captarán las imágenes de los asistentes, el oficiante y demás participantes. Las imágenes serán editadas en vivo y se podrán visionar en directo y a través de streaming desde cualquier parte del mundo. A la vez, en el desarrollo de la ceremonia, se podrán proyectar imágenes del difunto aportadas por la familia, que se verán en múltiples formatos, a través de las pantallas instaladas en en los tanatorios.

La empresa Mémora será la primera que ofrezca esta alternativa en España, a partir de 2015.

Nicho de mercado

Nunca más apropiada esta definición para un sector empresarial con posibilidades de ser explotado. www.esquelasdeasturias.com, reúne a varias de las empresas de la región bajo una misma firma digital. Ofrecen un sistema que incluye una APP para móviles, agradecimientos y compra de flores online o el seguimiento de los fallecimientos por municipios actualizado cada día.

Se trata, según su fundador, de promover una nueva vía de negocio a partir de las oportunidades que brinda internet. En 2013 la página recibió más de 10 millones de visitas, el 88% de las cuales eran, únicamente, de Asturias. El factor más importante, según sus fundadores, es la unificación de fuerzas de todas las funerarias implicadas en el portal.

Viaje de ida y vuelta

El presidente del Instituto Europeo de Criopreservación, Francisco Roldán, es el primer español que ha solicitado legalmente ser criopreservado tras su muerte. Este procedimiento, que consiste en conservar cadáveres congelados para revertirlos de la muerte en un futuro, está en situación de alegalidad en España. Sí funcionan empresas de criogenización de tejidos, como los cordones umbilicales, pero no de cadáveres. El precio de este procedimiento ronda los 200.000 euros y comienza tras la muerte, a ser posible, de forma inmediata. Un equipo médico debe bajar la temperatura del cuerpo, extraer la sangre e introducir en su lugar un líquido criogénico. Posteriormente, se trasladará el cuerpo a unas cápsulas herméticas ubicadas en el centro de preservación donde se inyectará nitrógeno líquido a altas presión, cristalizando el cadáver a 130 grados bajo cero.

Morirse es caro en España

Con un 21% de IVA, España es el país de la Unión Europea donde más impuestos se pagan por morir. El vicepresidente del grupo Mémora, Eduardo Vidal reclamaba recientemente un cambio de fiscalidad en este sentido y que la tributación aplicada a los servicios funerarios se sitúe en el grupo del IVA reducido. Antes, morirse estaba en la categoría de servicio público. Ahora está declarado de interés general. Antes se pagaba un 8%. Ahora un 21%.

Así, España es el país que más graba los servicios funerarios de toda Europa. Es, además, el único en el que existe el seguro de decesos, que supone un 6% añadido al impuesto general. 8 países de Europa están exentos de impuestos, 4 tienen un tipo impositivo reducido, 4 un impuesto de tipo general -como España- y 1 calificado como superreducido.

Al ciudadano, que no tiene posibilidad de librarse de este pago, esta situación le llega convertida en un incremento del 13% sobre los servicios funerarios, cuyo precio medio en España oscila de 2.800 a 3.300 euros, que pueden ascender hasta los 11.000 según el tipo de ceremonia y elementos que se contraten.