El mal tiempo no frena las compras del Viernes negro en Cantabria

Una jornada que ya anticipaban los carteles que llenan los escaparates de la mayoría de comercios desde hace días. Hay quien ha intentado darse prisa para asegurarse de que conseguía ese producto al que ya le tenía echado el ojo y quien ha aprovechado para adelantar regalos navideños. Y es que hoy es día de comprar más barato y eso en la calle se ha podido percibir en la cantidad de bolsas con las que paseaba mucha gente, en el trajín de entradas y salidas de las tiendas y, en algunos sitios, en las colas. «Cuando he llegado daba la vuelta al edificio», contaba Liseth Vilka tras salir del Zara de la calle Lealtad, en Santander, cargada con varias bolsas. Y es que allí los clientes han llegado casi antes que los propios trabajadores.

Desde luego antes de que les diera tiempo de subir la persiana. Luego la cola se ha trasladado al interior donde tocaba esperar para llegar a la caja. A falta de un mes para Navidad, la vecina de la capital cántabra, como otras tantas personas, ha aprovechado la mañana para avanzar en la larga lista de regalos. «Estaba esperando a este día para comprar las cosas de Navidad, que ahora vienen semanas de mucho movimiento» y cualquier descuento que ayude al bolsillo es siempre bien recibido. También María Martínez ha utilizado la mañana para hacer compras y así dejarlas listas antes de irse a clase. «He venido a echar un vistazo porque no todos los productos tienen descuentos», ha comentado a la salida de la misma gran superficie. Así que, por si acaso, ayer ya echó un vistazo en la web para ir con los deberes hechos.

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Las ganas por ir a los comercios se notan en los días previos porque «la gente espera» a ver los carteles con rebajas y eso frena las ventas de las semanas anteriores: «La pasada no fue nada buena y desde el lunes ha estado bastante parado», explicaba Carmen Castillo, de la zapatería Lua, ubicada precisamente frente a la tienda Zara de Santander. Aunque también reconoce que el de estas jornadas es un parón que se remonta gracias, precisamente, al viernes negro.

Un día que al menos la comerciante prevé que sea animado. Aunque ella pensaba en el cielo y la tregua que el tiempo ha concedido a primera hora, parece haberse terminado ya. «La gente se anima más a salir si hace bueno», ha reconocido. Con los carteles y los anuncios constantes, los comerciantes ya han puesto sobre la mesa toda la oferta y están, sobre todo, «expectantes», ha señalado esta mañana Lourdes Güezmes, de Perfumerías Güezmes, en la calle Rualasal. Su escaparate es uno de tantos decorado con varios carteles. «Esperamos que la tarde sea animada, pero a ver qué tal va». La responsable del establecimiento también ha comentado que este tipo de jornadas ayudan, a veces, a dar salida al stock extra que pueden tener de determinados productos. En otras superficies como Media Markt la decoración es un recordatorio constante de los descuentos que es posible aprovechar aunque ocurre que, al no centrarse las ofertas en una única jornada, la demanda se reparte en varios días y eso hace que ya no sean tan habituales las largas colas.

De allí Nuria Domínguez salía contenta tras haber dejado listos los regalos de una parte de la familia: «Ya he comprado los de mis suegros», ha comentado. Y con un ahorro importante para la cartera, por eso ha esperado a este día. «Estos descuentos cuando vas a comprar productos caros, vienen muy bien», ha añadido.