Peñacastillo sufre para meterse en semifinales de la Copa Apebol

El partido de la jornada lo disputaban Los Remedios y Peñacastillo en Maliaño, un desplazamiento obligado por el tiempo. Primera reválida para el campeón liguero ante una peña siempre incómoda y complicada de ganar. Con Sebi Iturbe en el cuarteto inicial en lugar de José Manuel González, el acto de apertura, que se quedó en casa, fue el único que se dirimió en dos tiradas.

A partir de ahí el cara a cara fue un duelo de poder a poder, con mucha madera de por medio y que se tuvo que resolver en el parcial de desempate. La muerte súbita se dirimió desde los dieciocho metros, la distancia máxima de la competición, y con la raya al medio al pulgar que habían colocado los de Cañas. No llegó al cierre la partida de Muslera, lo que dejó franco el camino a una peña santanderina que, con 40 justos, no falló para certificar su pase a semifinales.

El rival de Peñacastillo será J. Cuesta, que se impuso en la Severino Prieto a sus vecinos de Casa Sampedro por un contundente 4-1. A los de Cerrazo se les da bien la primera competición del curso y, tras quedarse a las puertas del título hace doce meses, en 2022 estarán de nuevo en la fase final después de un partido serio en el que los emboques volvieron a ser decisivos. Sobre todo uno, el logrado por Ángel Lavín en el primer chico y que sirvió para matar el cierre de los de Torres. A partir de ahí, los locales aprovecharon que sus rivales no remataron en ninguno de los parciales para cerrar en el quinto su pase a las semifinales.

Antes de que se vean las caras Peñacastillo y J. Cuesta, esta tarde saltarán al corro Andros, que eliminó el sábado a Camargo, y Casar, que superó ayer a Hermanos Borbolla por 4-2 en la cubierta Santiago Galas de Ontoria. Lo de los 'soperos' ya no es una sorpresa y tras lograr la permanencia con holgura la pasada campaña este curso quieren ir un paso más allá y escalar posiciones en el escalafón bolístico. A los de Cabezón se les dan mejor los equipos grandes que los de la zona baja y ayer volvieron a demostrar que tienen las ideas claras y, sobre todo, que el fichaje de David Cianca les puede dar muchas alegrías. Dos emboques del ex de San Jorge y otro de Fernando Ocejo, en este caso en el sexto parcial, fueron los ejecutores de los nojeños, que sin hacer un mal partido no estuvieron a la altura de juego de la semana anterior.