El Gobierno 'resucita' Comillas y dice que «hay dos empresas interesadas»

Fue su 'niña bonita' y lo recordó. Miguel Ángel Revilla fue fiel a su particular dejá vu y este viernes utilizó el Foro de Economía de ELDIARIO para resucitar, aunque sin concrección, el proyecto del español en Comillas que llevaría implícita la conservación de la riqueza patrimonial de la Universidad Pontificia. El presidente de Gobierno reveló que «hay dos empresas interesadas» y añadió que la Universidad cántabra «está preparando algo para que no se no caiga». Sobre ese posible y ese futuro, no dijo más ni aportó dato alguno.

Al hacer mención a ese macroproyecto del español, Revilla sacó pecho para decir que en su día obtuvo financiación de las grandes empresasd de España y del Gobierno de Zapatero, pero añadió que todo decayó por culpa del anterior Ejecutivo. Un culpable al que también responsabilizó de haber imposibilitado que Colegios del Mundo ejecutara su proyecto en Comillas. «Le están acabando en Alemania, nos lo quitaron; aquí pararon el proyecto», lamentó.

El presidente regional volvió a repetir que el español es un valor en alza, industrial y cultural, por lo que reivindicó el viejo proyecto de convertir Comillas en un foro de estudio, análisis y educación de una lengua «que llegará a ser mayoritaria». Mientras llega, reprochó que parte del edificio esté cayéndose por la dejación de sus predecesores. Y hecha la afirmación pregonó lo que todos los presentes en el acto ya habían oído muchas veces: «Que abandonar ese proyecto ha sido mi mayor disgusto», para remachar su reflexión asegurando que «catalanes y vascos jamás hubieran consentido que un patrimonio de este tipo estuviera en esa situación».

Dudas sobre Valdecilla

Revilla también hizo una leve reflexión sobre el hospital Valdecilla. Reconoció que el actual Gobierno central ha pagado parte de lo adeuadado y prometido, pero anunció que seguirá siendo beligerante porque quedan por abonar otros 95 millones de euros de las obras. «Lo deben porque es un compromiso, porque nuestro hospital es nacional y referencia; no es el hospital solo de Cantabria».

Y volvió a arrojar dudas sobre el contrato público-privado que ha posibilitado la terminación de las obras del centro médico. Y no dijo nada nuevo. Afirmó que se analizará y que se aceptará si «está bien», pero añadió que «es un contrato raro», duda que culminó con una frase no menos ácida: «Es muy dudoso que a fecha de hoy eso sea de Cantabria y no de la empresa».